CONTEXTOS
Mirtha Ileana Villalvazo Amaya enfrenta una nueva insurrección al interior del ayuntamiento de Bahía de Banderas, conflictos que igual pueden tener origen en sus arrebatos primaverales y si no, reducirse simplemente a penas de una mujer atragantada de un poder de naturaleza inalienable, al que a rajatabla asume como suyo aún bajo riesgos de perderlo por ingobernabilidad.
La noche del viernes la mayoría de los integrantes del próspero ayuntamiento vecino se apersonaron en el recinto oficial de sesiones “11 de diciembre” para darle formalidad a una sesión previamente convocada por 9 de los 14 miembros, incluyendo a la primera edil, pero hallaron sellado el acceso. Entonces, forzaron cerraduras e instalaron la sesión en ausencia de Mirtha Villalvazo y cuatro regidores que le son incondicionales.
Esa noche del viernes aprobaron la destitución de dos funcionarios de primer nivel, de la tesorera Melina Eugenia Estrada y de la titular de Planeación Urbana.
No es ni por asomo el primer escándalo que la mayoría de los regidores le revientan a la temperamental alcaldesa del vecino municipio.
Lo que vimos el fin de semana son escenas que presumen que en Bahía de Bandera no hay gobernabilidad. Otros aducen que se trata de sucesos protagonizados por energúmenos que toman por asalto un recinto de trabajo.
En el transcurso de la semana, los nueve regidores caminaron una ruta que ya se la saben. Aislados del equipo de Mirtha Villalvazo convocaron la sesión extraordinaria para lo cual contaron con la ayuda del titular de la Sindicatura. En las escaramuzas políticas del año pasado, Julio Robles Lima desde la sindicatura municipal, jugó un rol importante del lado de los insubordinados que concluyeron en procesos contra el secretario general, Joel Abad Jiménez Lozano.
El secretario, como hace un año Jiménez Abad, desacató la petición. No se informó sobre el argumento para desentenderse de la solicitud de los regidores, pero desde el círculo rojo de la alcaldesa deslizaron la versión de que la solicitud atentaba contra derechos de los funcionarios aludidos al incluir como punto la destitución sin aportar argumentos. El trámite normal de investigar señalamientos de presuntas anomalías recae en la Contraloría y ya después sus conclusiones o dictámenes deberán pasar por el pleno.
Los problemas de la abogada que despacha en la alcaldía iniciaron días antes de echarse en sus espaldas la responsabilidad de gobernar el municipio más rico de Nayarit. No se sabe con claridad qué vínculos la unieron con Juan Jaime Llamas Rivera, un profesionista avecindado en el municipio con un oscuro pasado como tesorero del municipio de Ahuacatlán. Los interesados en rastrear las huellas del equipo del gobierno de Mirtha hallaron una escandalosa gestión de su tesorero. Había sido destituido por graves faltas en el manejo del dinero del pueblo. Contra viento y marea lo sostuvo hasta la primera semana de abril y su lugar lo ocupó la contadora Melina Estrada.
En febrero del año pasado trascendió haber presuntos actos de corrupción en la jefatura de Licitación y Concurso de Obras. Esta vez, el funcionario municipal señalado fue otro incondicional golondrino que hizo de las suyas en diversas licitaciones de obra pública en los primeros meses de la actual administración por un monto que se acercó a los cinco millones de pesos. Se trataba de Eduardo Huerta Marcial con antecedentes públicos en el gobierno de Tlaquepaque, justo en donde se rastrearon algunos domicilios señalados de ser sede de algunas empresas beneficiadas con obra. El tal Lalo Huerta fue director de Normatividad de 2015 a 2021, cuando María Elena Limón García fue presidente municipal por dos periodos por el Movimiento Ciudadano.
La investigación le significó al periodista Luis Segura una agresión menor, que no pasó a mayores. “Así las cosas… Saludos recibidos. Lo bueno que me dijeron que me confundieron, si no quien sabe” publicó la noche del miércoles 16 de febrero Luis Segura en sus redes sociales. En tórax y brazos tenía algunas magulladuras.
La mañana de ese día había tenido una ríspida discusión con el funcionario municipal en una oficina alterna de Nuevo Vallarta. “Se donde vives, que carro tienes, atente a lo que señalas”, le advirtió esa mañana.
Entonces le llegó la primavera a Mirtha Vilallvazo. Antes de concluir el mes de marzo denunciaron a su secretario general, Joel Abad Jiménez Lozano, quien para buenas señas es señalado de tener parentesco. Siete regidores y el síndico, Julio Robles Lima lo acusaron por múltiples desacato, la misma acusación bajo la cual removieron al secretario Jiménez Lozano y a la titular de Planeación Urbana. Al secretario, días después sería separado por algunas semanas y luego reinstalado.
El fuego del fin de semana no ha sido apagado. Queda por saber que resuelven instancias superiores en juicios por interponerse. En un comunicado, el gobierno municipal narra su propia versión, relativo a una sesión llevada a cabo el 11 de diciembre del 2022: “Con fecha jueves 16 de marzo de 2023 se recibió en la Secretaría del Ayuntamiento un oficio presentado por el síndico y 9 regidoras” en donde se convocada a sesión para ese mismo día a las 20:30 horas horas. “Con tiempo de antelación a esa hora, el secretario informó a los convocantes que dicho citatorio no cumplía los requerimientos formales establecidos en la Ley Municipal para el Estado de Nayarit”.
Para argumentar la ilegalidad del acuerdo de los regidores insurrectos aducen que contagios de Covid impidieron efectuar la sesión para no arriesgar la salud del personal. Con esas condiciones, esa noche del viernes se enteraron que los regidores se apersonaron en la presidencia municipal. El reporte de los oficiales de resguardo, detalle entre las incidencias que una persona ajena al gobierno, el síndico y 9 regidores forzaron la puerta del salón de sesiones “11 de diciembre”, reporte que se notificó al Ministerio Público de la Fiscalía de Justicia de Nayarit con sede en Bucerías para su pronta investigación.
Desconocemos qué tipo de padecimientos arrastra Mirtha Villalvazo que en el éxtasis de una serie de arrebatos toman forma de dañinos conflictos. Alguna desadaptación debe cargar la dama, incapaz de controlar sus ímpetus que le han llevado a colisionar con regidores y funcionarios y hasta con su comadre Lía Sarahí Castro Díaz de León, quien en mayo del año pasado renunció a la presidencia del DIF Municipal.
La comadre Lía acusó a su comadre Mirtha de encabezar un gobierno donde abundaba el nepotismo y el despotismo. La pareja de la comadre, Cesar Augusto Aguirre era el titiritero de la comadre y quien ordenaba todo lo que en el gobierno se hacía o se dejaba de hacer. El rompimiento de las comadres fue tan violento que la ex presidenta del DIF debió refugiarse en el extranjero por temor de acciones en su contra por la comadre o su pareja Cesar Augusto.
Ya en la segunda parte de su gestión, la alcaldesa de Bahía de Banderas no parece haber aprendido el que hacer de gobernar el municipio. Los conflictos se repiten en modo preocupante. El fantasma de la desgobernabilidad amenaza es latente. Los argumentos de la alcaldesa son inverosímiles y poco creíbles y le pueden dar repetir el palo del año pasado, cuando removieron a sus colaboradores. En cuerpo de gobierno colegiado, como un ayuntamiento, la mayoría manda, y si se declara fundada la mayoría calificada, las repercusiones serán graves.
Revolcadero
Decíamos que Mirtha Ileana Villalvazo Amaya pudo llegar a la presidencia municipal por una vía accidentada y en consecuencia, la hace creer que a nadie le deba nada. Había sido funcionaria de quinta en Poder Judicial de Nayarit y en el gobierno municipal; además se empleó en una suerte de asistente y secretaria particular de un jefe de la policía municipal en los gobiernos “prianistas” de Bahía de Banderas. Es beneficiaria de una serie de yerros cometidos por la maestra Carmina Yadira Regalado Mardueño quien a su vez, desde una diputación federal obtenida a través del método moreno del “sorteo” se hizo de la candidatura a la alcaldía. La maestra hizo lo mismo que candidatos “de antes”. Se acercó a oscuros personajes que le entregaron fajos de billetes para fondear su campaña electoral. Los mandos del partido decidieron retirarle la candidatura. La sustituta fue Mirtha Villalvazo. En alianza con el Partido del Trabajo, Verde Ecologista y Nueva Alianza (Panal) ganó la elección y a partir del 17 de septiembre de 2021 arrancó su periodo de gobierno. Ya entró a su etapa final pero la fogosa dama nomás no aprende a gobernar. ****** Unos de nuestros lectores ixtapenses, padre de familia de alumnos de la escuela Primaria Emancipación, nos hico llegar un escrito de inconformidad el cual dice: “Durante la administración anterior los puestos del tianguis respetaban el acceso a nuestra escuela, sin embargo poco a poco han ido tomando espacio y es un casi para nuestra institución el ingreso y saluda de los alumnos (los días miércoles). Puestos en la banqueta y colgados de los conectores de la escuela, que han causado en este año la quema de una de las fases y centro de carga. De conformidad con la Ley de Protección Civil, hay riesgos por este tipo de prácticas y es lo que nos preocupa como institución”. Acompaña el texto con dos fotografías donde se ilustra la maraña de telarañas de cables colgados de postes. Como dice la compañía Telcel, si la autoridad competente ya atendió la petición que “haga caso omiso.*******Si el gobernador del estado, Enrique Alfaro Ramírez esta preocupado en el bienestar de los vallartenses bien haría en destinar recursos para ampliar las instalaciones, contratar más personal, mejorar las atenciones y en general destinar más recursos al Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses. La familia de un amigo fallecido la semana pasada padeció la necesidad de trasladar el cuerpo de su familiar hasta las instalaciones del IJCF de La Huerta para cumplir ciertas obligaciones. El personal de la oficina local solo les informó que tenían demasiado trabajo, trabajo imposible de realizar por falta de personal de medicina forense. La familia debió esperar hasta tres días para recibir el cuerpo. Pero bueno, el gobernador Alfaro anda preocupado por imponer su infame programa de verificación responsable pues ahí está el dinero.
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