En las jornadas de liberación de tortugas también piden aplicar medidas sanitarias a los asistentes para presenciarlas
En Puerto Vallarta inició la temporada de liberación de tortugas a mediados de este mes y concluye en diciembre, con la particularidad de que los turistas pueden formar parte del acontecimiento en tanto cumplan las medidas sanitarias correspondientes.
A las sesiones de liberación de tortugas pueden acudir máximo 30 personas, todas deben respetar el distanciamiento social, usar gel antibacterial y portar cubrebocas de manera obligatoria.
Algunos de los hoteles que cuentan con este programa de liberación son Casa Magna Marriott, Fiesta Americana, Presidente Intercontinental, Westin Resort, Dreams y Velas Vallarta, cada uno de los cuales libera decenas de miles de crías.
Además, el programa municipal en una sola temporada recolecta más de dos mil nidos y libera cerca de 150 mil crías.
En 2019, los diferentes campamentos y voluntarios lograron integrar más de 2,800 nidos. En total liberaron a un aproximado de 200,000 crías.
Las sesiones inician con una plática sobre educación ambiental, luego en algunos casos los asistentes reciben una cáscara de coco en la que se les entrega una tortuga recién nacida.
Las liberaciones se realizan en los campamentos y en las playas de diversos hoteles y se hacen cuando cae el sol para evitar que depredadores naturales como las aves o los peces grandes ataquen a las tortuguitas.
El acceso y la participación en liberaciones son gratuitos, aunque puede aportarse una donación económica para solventar el trabajo de las asociaciones civiles autorizadas que realizan la actividad.
Las personas interesadas pueden también adoptar un nido al que se le pone el nombre del adoptante. En cuanto nacen las tortugas se invita al adoptante a acudir al campamento para realizar la liberación.
Las tortugas golfinas llegan a diferentes playas de Puerto Vallarta y el Pacífico para desovar. En cuanto desovan los huevos son trasladados a viveros seguros vigilados por la dirección municipal de Ecología y por voluntarios de diferentes asociaciones.
Además se le pide a los bañistas que cuando vean a una tortuga llegar a la playa a desovar no la molesten y se alejen varios metros.