En proceso de remozamiento de un icono de Puerto Vallarta, la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe está haciendo rehabilitada, específicamente la cúpula principal, la cual fue construida en la década de los años 30 del siglo pasado.
Debido al deterioro al paso del tiempo obliga a que la estructura reciba mantenimiento, además de grietas y fisuras que la ponen en riesgo.
“Estamos atendiendo la parte externa (de la cúpula), ya estamos en la recta final. Vamos a continuar los trabajos después, cuando tengamos algún fondo para poder atender los daños del interno”, expresó el párroco Arturo Arana López, quien agradeció a todas las personas que han apoyado con los gastos.
Originalmente -detalla el párroco- la obra de rehabilitación de la cúpula estaba presupuestada en 3 millones de pesos. “Hemos invertido arribita de 1 millón 700 mil pesos, afortunadamente, vamos a gastar menos de lo que habíamos presupuestado al principio. Claro, que si sumamos la reparación externa y la interna, pues sí, serían quizá un poquito más de los tres millones de pesos”, detalló.
A decir del párroco, se ha tenido recursos suficientes para iniciar la obra, además de que se han desarrollado una serie de actividades para poder recaudar fondos, sin embargo, no se tiene la certeza de contar con la totalidad.
El sacerdote Arana López dijo que los trabajos están avanzados como para no poder comprometerlos con la presencia de lluvias, pues se ha reestructurado ya la cúpula por fuera para evitar infiltraciones.
“Afortunadamente ya no son una amenaza las lluvias, porque se taparon las grietas que se tenían, se le aplicó encima la fibra de carbono que viene como a compactar toda la cúpula y estamos en el momento de poner todo el azulejo, ya está un 90 por ciento del azulejo colocado, pero, ahora sí que el azulejo viene a ser como el adornito, ya en la cúpula no se filtra el agua, de tal modo que la lluvia ahorita no viene a ser una amenaza”, agregó el presbítero.
Se estima que los trabajos de rehabilitación al exterior concluyan en poco más de un mes, para posteriormente, si los recursos lo permiten, continuar con la rehabilitación al interior, cuyos detalles explicó el párroco.
“En lo interno se está cayendo la capa de pintura, entonces hemos de retirarla completamente. Y un tanto el enjarre para aplicar algunos químicos y luego pues volverá en pintar”, expresó Arana López, al detallar también que se han caído las laminitas de oro que recubren la cúpula.
“Ahora sí que en la parroquia de Guadalupe, lo que brilla sí es oro, y las laminitas poco a poquito con la humedad se han ido cayendo, pues ya después si el dinero nos da para volverle a colocar el oro, pues se lo colocaremos como originalmente”, expresó.
El párroco llamó a los feligreses y a la comunidad vallartense ya no desfallecer en ánimos y a seguir apoyando en los trabajos de rehabilitación.
(JFC)
