Frente a la problemática es responsabilidad de todos, asegura la presidenta del Colegio de Sicólogos en vísperas del Día Mundial de Prevención del Suicidio
Frente a la preocupante alza en la incidencia de suicidios consumados en Puerto Vallarta y debido a que las instituciones públicas están rebasas, es necesario sensibilizar a la sociedad ante el incremento de suicidios, además de saber cómo prevenirlos “porque el suicidio es prevenible y es responsabilidad de todos prevenirlos”, aseguró María de la Luz Aviña Jiménez, presidenta del Colegio de Sicólogos.
En entrevista en vísperas del Día Mundial de Prevención del Suicidio, refirió que los intentos de suicidio son anunciados la mayoría de las veces, ya sea de manera directa o indirecta, conviene estar atento a este tipo de alertas a fin de aplicar los denominados primeros auxilios psicológicos, que pueden evitar terribles desenlaces.
Indicó que la capacitación en primeros auxilios sicológicos darse desde la familia, así como en el entorno educativo y laboral para poder brindar apoyo a personas con conductas o tendencias suicidas, sin necesidad de ser sicólogo o siquiatra.
Una capacitación que se viene dando en el Centro Integral de Salud Mental (Cisame) para que aquellos que la reciban se conviertan en multiplicadores de los primeros auxilios sicológicos que son la base fundamental de intervenciones en crisis, precisó la maestra en sicología.
Considera que si bien en el municipio existe un Cisame, así como servicios de atención de profesionistas en salud mental, tanto en el sector salud, como el DIF o el Centro de Atención Sicológica del CUC, además en la medicina particular, “son insuficientes ante el problema, ya que los conoce de los casos de suicidios consumados, cuando detrás de cada uno hay por lo menos otros casos de intentos de suicidios”.
“Una cifra oculta, así le llamamos y es la que más preocupa, y precisamente ahí es donde se requiere la participación de todos; así como cualquier persona sin ser médico puede saber y dar de primeros auxilios de medicina general; los primeros auxilios sicológicos los pueden brindar sin ser sicólogos o siquiatras”, puntualizó Aviña Jiménez.
Destacó que así con una serie de recomendaciones que la ciudadanía puede aplicar desde sus hogares con familiares o amigos que padezcan de depresión, ansiedad o cualquier indicativo que denote su deseo por atentar en contra de su vida, para así evitar más suicidios “porque estos son prevenibles, y es labor de todos”.
Primero identificar señales de alerta
No siempre puedes saber cuándo un ser querido o un amigo está pensando en suicidarse. Sin embargo, estos son algunos signos frecuentes:
- Hablar acerca del suicidio; por ejemplo, hacer afirmaciones como «voy a matarme», «quisiera estar muerto» o «desearía no haber nacido»
- Obtener los medios para atentar contra tu propia vida, como comprar un arma o almacenar píldoras
- Retraimiento de la vida social y deseo de estar solo
- Tener cambios de humor, como pasar de estar eufórico un día a estar profundamente desalentado al día siguiente
- Preocuparse por la muerte, por el hecho de morir o por la violencia
- Sentir desesperanza o impotencia ante una situación
- Aumentar el consumo de alcohol o de drogas
- Sufrir cambios en la rutina normal, por ejemplo, cambios en la alimentación y en los horarios de sueño
- Hacer cosas riesgosas o autodestructivas, como consumir drogas o conducir con imprudencia
- Regalar sus pertenencias o dejar sus asuntos en orden cuando no existen motivos lógicos para hacerlo
- Despedirse de las personas como si la despedida fuera definitiva
- Desarrollar cambios de personalidad o estar sumamente ansioso o agitado, en particular al experimentar algunos de los signos de advertencia antes indicados
Una vez identificadas algunas de estas señales es cuando se deben de dar los primeros auxilios sicológicos de los que actualmente el Cisame imparte en grupos organizados de la sociedad, así como en centros educativos y dependencias públicas.
Guía de primeros auxilios psicológicos
En esta guía de un taller al respecto subraya que es importante mantener un contacto psicológico con la personas, por lo que se recomienda guardar la calma cuando se identifica una situación de este tipo, no expresar las mismas emociones que presenta el afectado, y evitar las palabras motivacionales.
“Las palabras sobran cuando una persona se siente desalentada, hay que aprender a escuchar, a dejar que la otra persona hable y saque toda la carga emocional que trae dentro, preguntarle con serenidad cómo y qué es lo que siente en ese momento”, recomiendan resaltando la importancia de tener apertura a conocer el sentir de los demás cuando se enfrenta con una problemática parecida.
Buscar ayuda profesional
Otro de los aspectos que señaló como importantes es la valoración de la situación, si con aplicar los puntos anteriores se logró establecer un ambiente de tranquilidad, sin tensión, o si está en un momento de crisis del que no puede salir, de ser así el primer paso es buscar ayuda profesional.
“Si no hay pensamientos suicidas pero hay malestar, se le recomienda que vaya a terapia.
Si hay pensamiento suicida, se le lleva con un especialista. Pero si ya hubo un intento de suicidio, de manera inmediata debe haber un internamiento”. Sin embargo en Puerto Vallarta se carece de una institución para la hospitalización de pacientes con trastornos mentales, algunos de los cuales pueden derivar en suicidios.
