Equipos de la Red de Asistencia a Ballenas Enmalladas (RABEN) realizaron sendos rescates de cetáceos en problemas en La Paz, BCS, y la Bahía de Banderas, el pasado fin de semana, dos éxitos más que se suman en la presente temporada de avistamiento 2022-2023.
Astrid Frisch Jordán, coordinadora nacional de RABEN, detalló que por segunda vez este año y segunda vez en toda la historia de esa agrupación de rescatistas, “tuvimos que atender dos reportes de enmallamientos al mismo tiempo. Ambos casos ballenas jorobadas enredadas en redes agalleras o chinchorros, una en Bahía de Banderas y la otra al norte de La Paz”.
Agregó que ambos casos muy complicados y en ambos se logró, felizmente, liberar a las ballenas.
“La ballena de La Paz quedó con un poco de red en el vientre, esta red no hace peligrar su vida, ya que se puede desplazar y alimentar sin problema. No se logró quitar toda la red ya que, contra nuestras recomendaciones, un ‘buen samaritano’ cortó parte de la red y esto dificultó el acceso a la red restante”.
Añadió que debido a la dificultad de los casos y del tipo de red, en las maniobras se perdieron alrededor de 55 mil pesos en herramientas especializadas, pero “para nosotros, dos ballenas con una segunda oportunidad de vida no tienen precio. Agradecemos a todos nuestros patrocinadores y donadores, ya que gracias a su apoyo podemos contar con el equipamiento necesario para poder rescatar a las ballenas”, entre ellos la institución WWF México, la Fundación Ecológica Biomar, A.C.
En más información del tema de las ballenas, lamentablemente el fin de semana fue encontrada una cría muerta a la orilla de la playa Destiladeras, en la parte norte de la bahía. El ballenato quedó encallado en la playa.
Según especialistas, la cría tenía más de 7 metros de largo, y no presentaba huellas de haber recibido algún golpe o agresión de depredador, por lo que se considera que fue muerte natural.
El cuerpo fue enterrado muy cerca del lugar del hallazgo.
