La dependencia llama a vacunar a menores de 5 años que no tienen la vacuna y a partir de los 6 años a aplicarse una dosis de refuerzo
Debido al incremento de casos de sarampión a nivel internacional y ante la alerta emitida por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en la Región de las Américas, la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ) refuerza la vigilancia epidemiológica en el territorio estatal.
El director de Evidencia e Inteligencia en Salud de la SSJ, Roberto Carlos Rivera Ávila, informó que en todo el país se lleva a cabo el monitoreo de esta enfermedad mediante el Sistema de Vigilancia Epidemiológica de las Enfermedades Febriles Exantemáticas (EFE), el cual está enfocado en identificar casos de sarampión y rubéola oportunamente.
“En Jalisco la vigilancia epidemiológica de sarampión es permanente y se aplica en todas las unidades del Sector Salud, quienes deben de notificar de forma inmediata los casos probables que detecten, adicionalmente en las áreas de sanidad internacional, tanto en el aeropuerto internacional de Guadalajara como en Puerto Vallarta, se aplican acciones de vigilancia epidemiológica para la detección de viajeros que pudieran presentar signos de la enfermedad”, precisó.
El médico epidemiólogo informó que en el estado, el último caso autóctono de sarampión se reportó hace 33 años.
“En Jalisco no se presentan casos autóctonos o importados de sarampión desde 1994, por lo que actualmente el riesgo de infectarse esta mayormente asociado con el contacto con personas que provengan del extranjero o aquellas personas sin antecedente de viaje que realicen un viaje fuera de México a lugares donde se estén presentando casos, por lo que si alguna persona considera que pudo haber estado expuesto o en riesgo y presenta síntomas tales como: fiebre y exantema que son unas manchas de color rosa o rojizo, le solicitamos acudir de inmediato a requerir atención médica”.
Rivera Ávila agregó que la población en riesgo incluye a niñas y niños pequeños y a mujeres embarazadas sin vacunar. Sin embargo, puede infectarse cualquier persona que no esté inmunizada, es decir, que no haya sido vacunada y no haya sufrido la enfermedad; así como en poblaciones con altos niveles de desnutrición y falta de atención médica adecuada.
Recordó que la transmisión de persona a persona es por el contacto directo o indirecto con gotas de las secreciones procedentes de la nariz, boca y faringe de las personas infectadas.
“La medida más exitosa contra el sarampión es la vacunación, por lo que invitamos a toda la población a verificar su situación vacunal, muy en especial a las madres, padres o tutores de niñas y niños menores de cinco años asegurarse de que tengan sus esquemas de vacunación completos. Y niñas y niños mayores de cinco años, asegurarse que reciban una dosis de refuerzo”, dijo Rivera Ávila.
El especialista recalcó que la dependencia cuenta con abasto suficiente de vacunas para proteger de la enfermedad, a niñas y niños de uno a doce años.