Ante el auge de fraudes por seudo agentes de viajes, proponen línea directa para denuncias
Ante el auge de fraudes de agencias de viajes “patito”, la Asociación Mexicana de Agencias de Viajes (AMAV) solicitó a la Policía Cibernética la creación de un correo para recibir las denuncias contra estas pseudo empresas, las cuales serán canalizadas a dicha instancia para su atención.
A través de un comunicado de ese organismo que replican los socios en diferentes partes del país, incluyendo Puerto Vallarta, la AMAV agregó que cerró filas con la Secretaría de Turismo (Sectur) para implementar una campaña de orientación al turista sobre este tipo de empresas y evitar que sean sorprendidos, pues México es el país de América Latina que registra más fraudes cibernéticos con un promedio de 463 delitos cada hora.
El objetivo es que los afectados pueden dirigir su caso al correo para agilizar su atención por parte de la Policía Cibernética, lo cual reducirá también los tiempos de espera y evitará que el fraude llegue a cometerse al intervenir con prontitud.
El importe de fraudes cibernéticos en general a nivel mundial asciende a casi dos billones de dólares anuales, cifra que en México fue de cuatro mil 500 millones de dólares en 2019, sin que se tengan datos precisos del sector que representa, por lo que el correo serviría también para generar estadística sobre el tema.
Datos oficiales señalan que en años recientes se cometieron un aproximado de cuatro millones de fraudes electrónicos y de banca móvil, y ocho de cada 10 empresas sufrieron por lo menos un ataque al año.
Cada mes se reportan 333 mil casos, que suman tres millones 996 mil al año, luego de que entre 2013 y 2019 la cifra pasara de 276 mil a más de tres millones de casos.
Una agencia de viajes formalmente establecida, afiliada a la AMAV, fue víctima recientemente de un fraude por medio millón de pesos, pero tardó más de 15 días para interponer la denuncia ante el Ministerio Público y pasarle la copia a la Policía Cibernética, lo cual se pretende reducir a no más de tres días, pues la rapidez de la denuncia puede hacer la diferencia para que los delincuentes concreten el fraude y se apoderen de los recursos.
Los delincuentes son cada vez más sotisticados para eliminar cualquier sospecha y que la gente caiga en el engaño, por lo que llegan incluso a suplantar los nombres de cadenas hoteleras, dejando a los turistas en estado de indefensión al no haber una línea directa de denuncia ciudadana.
Tampoco cuentan con datos de la agencia “patito” para presentar una queja ante la Procuraduría Federal del Consumidor, ni interponer una demanda ante un juzgado civil.