Así lo considera la Asociación de Ejecutivos de Recursos Humanos de Puerto Vallarta y Bahúa de Banderas
Aunque el presidente López Obrador dice que ante la emergencia por el Covid-19 ante todo su gobierno busca proteger a las clases más necesitadas, la realidad es que al negar apoyo al sector privado dejará descobijada a la clase trabajadora y el daño que provocará con ello podría llevar hasta cerca de una década la recuperación.
Así lo manifestó Arturo Cruz Castellanos, presidente de la Asociación de Ejecutivos de Recursos Humanos en Puerto Vallarta, Bahía de Banderas y Costalegre, quien calificó como “tormenta perfecta” lo que está provocando AMLO al no asumir su postura como jefe de estado.
“No debe de temblarle la mano para utilizar los recovecos de la herramienta extrajurídica y llamarle contingencia, emergencia y tomar el apoyo que necesitan los empresarios, las cargas tributarias de por sí ya sobre cargadas de impuestos, para afrontar esa responsabilidad social que tiene el sector patronal”.
En consecuencia, advirtió, el sector obrero perderá una gran cantidad de empleos y eso acentuará la inseguridad, marginación y pobreza, grandes males que aquejan al país desde antes de la contingencia.
De esa forma se expresó Cruz Castellanos, con respecto al mensaje que emitió el presidente en días pasados, “un berrinche” que desencantó a la iniciativa privada, claro ejemplo de ausencia de liderazgo.
“No tiene un plan y la sociedad civil tendrá que salir adelante con todo lo que viene, entre otras cosas la debacle económica del país. No se ha dado la voz al sector empresarial, al obrero. El Presidente ya fue rebasado”.
Al cabo, advirtió que las secuelas abarcarán de tres a nueve años, pronóstico basado en los ciclos económicos de una crisis económica recurrente.
