CONTEXTOS
Estamos en plena semana de la mujer, que frente a la ancestral violencia han emprendido su propia revolución feminista nacional en un abierto reclamo a una clase gobernante insensible e indolente que se niega brindarles garantías de protección.
Sobre las mujeres ha caído una violencia y en su defensa reaccionan para hacerse escuchar y tomarán las calles del país para conmemorar el Día Internacional de la Mujer el domingo y el lunes 9 ausentarse de calles y empresas al llamado de “un día sin mujeres”.
Un colectivo de mujeres vallartenses tomó la iniciativa de organizar un calendario de actividades que se abre la noche de este miércoles 4 de marzo con la lectura dramatizada de la obra “Mujeres de Arena”. El ciclo de actividades culminará el domingo 8 por la tarde con una marcha denominada “vivas las queremos”.
Las feministas en extremo han tomado con seriedad la convocatoria de reclamar derechos a sus ultrajes en casa, en fuentes de trabajo, en la calle, en cualquier punto geográfico y momento cotidiano. Creen es el momento de dar todo, de apostar y ganarle al gobernante que se asumen de izquierda y protectores de la mujer al mismo tiempo que descalifican su movilizaciones y rechazan sus demanda.
El gobierno de la república, con Andrés Manuel López Obrador, en Jalisco el gobernador Enrique Alfaro Ramírez, ha ido a contrasentido de la lucha feminista. Alfaro agravió a las mujeres jaliscienses cuando decretó al inicio de sui gestión la extinción del Instituto de la Mujer. López Obrador retiró apoyos a programas dirigidos a mujeres vulnerables, redujo presupuestos a las estancias infantiles y hasta negó la violencia de género como un problema público.
En una de sus mañaneras, AMLO recriminó a los periodistas que le cuestionaron el día que se difundió el llamado de “las brujas del mar” al invocar a las mujeres el lunes 9 “un día sin nosotras”. Lo importante es la rifa del avión, dijo en tono su disgusto y bateó las preguntas. La primera dama Beatriz Gutiérrez se sumó al llamado y una hora después borró su apoyo y publicó una convocatoria opuesta a la primera. “Un día más con nosotras está mejor”, escribió. Esa fue la línea adoptada por el gobierno lopezobradorista, combatir hasta desalentar la jornada del lunes 9.
El partido gobernante, el Movimiento de Regeneración Nacional, posee mayoría apabullante en el Senado y en el Congreso, lo que no dilataría aprobar leyes benignas para las mujeres. Sin embargo, los legisladores morenos no han mostrado voluntad de crear leyes que amparen y protejan a las mujeres y castigue a quienes las violentan, asesinan, a los que abusen de ellas.
Abundan vacíos jurídicos, iniciativas de ley congeladas en temas como el aborto, pero ni siquiera con ella violencia que las azota en estos tiempos han legislado para blindarlas. El colmo es la última iniciativa de una legisladora de Morena Jannet Téllez, que propone castigar con trabajo comunitario a mujeres que hayan abortado.
El régimen de Morena, declarados de izquierda, en voz de López Obrador se desentiende de la movilización feminista de tal forma que procura construir una maraña legaloide tendiente a complicar la configuración del feminicidio.
Hombres y mujeres, la sociedad en su conjunto, se conmocionaron con los atroces casos del asesinato de Ingrid y la niña Fátima y el de una joven mamá que en la tragedia de ver morir a su bebé arrojó el cuerpecito a un baldío. Todo en su conjunto alentó la participación de colectivos de mujeres, universidades, organizaciones empresariales y se sumaron al paro nacional de las mujeres y a la marcha del domingo.
Desde que se supo de la convocatoria, el gobierno federal descalificó la jornada del lunes 9. De inmediato, sus fans, funcionarios, legisladores de Morena, se sumaron al llamado de no apoyar el día sin mujeres. Acusó a los conservadores, a panistas, neoliberales de estar atrás del llamado y se pretender golpearlo. Por decirlo de manera más clara, aunque dijo permitir a quienes desde el gobierno se sumen a la ola del feminismo, López Obrador politizó el tema.
La oleada de movilizaciones de estos días no es una guerra entre conservadores o neoliberales contra los gobernantes de la izquierda. Ellas protestan contra la violencia física, en el hogar, la violencia laboral, el acoso sexual en las calles.
Mientras el país se despedaza, por la violencia, los brotes epidemiológicos de ese virus chino y la economía se contrae, la rebelión de las mujeres parecen tener nervioso al presidente de la república. Las ejecuciones, los asesinatos en masa, los feminicidios saltan por todos los rincones del país.
Por ahí un periodista publicó un dato que nos llamó la atención. Citó una encuesta de los pasados comicios electorales de la cual sustrae el dato de que apenas el 49 por ciento de las mujeres mexicanas votaron por AMLO. La mayoría de las mujeres votaron por un candidato opuesto a él. Eso cuando el 65 por ciento de los hombres votaron por el tabasqueño. Quién sabe si López Obrador no les perdona ese agravio y por eso las desprecia. Hoy, desde la presidencia tiene oportunidad de reivindicarse y ganarse las simpatías del mal llamado sexo débil.
No nos queda claro las causas por las cuales se toma a la mujer como un de hogar, como un obrero de segunda mano en una empresa, sin capacidad para competir por el mejor empleo y salario igual al varón. No nos convencen las teorías del ser misógino tiene condenadas a las mujeres a vivir bajo el yugo del hombre, su pareja, marido, jefe, padre, hermano del compañero de trabajo.
Lo que sí es cierto es la ancestral cultura a la mexicana de colocar a la mujer un paso atrás del hombre. En lo particular nos llamó la atención ver a familias de coras, mexicaneros, tepehuanos, y huicholes que al bajar de sus pueblos a los valles costeros, caminar en perfectas filas, hombres adelante y mujeres atrás. Era el fiel reflejo del patriarcado heredado desde los tiempos aztecas y más atrás.
En la inconsciencia de la mujer, por lo menos hasta estos días de la revuelta femenina por sus derechos, se acepta en una posición de la que se proponen salir. Cuando aquel ex abrupto de Vicente Fox, la del “viejerío”, hubo brotes de reclamo que advertían los nuevos tiempos por venir. Frase como “la equidad de género” sustituyen poco a poco las celebras frases dichas por celebridades de la política nacional, como aquella que definió a la mujer con “la lavadora de dos patas”.
Revolcadero
Decíamos que el programa confeccionado por el colectivo de mujeres locales arranca la noche de este miércoles 4 de marzo con la lectura dramatizada “Mujeres de Arena” en el bar “La Gata Foro” de la calle Allende. El jueves se ofrece el taller “afrontando el dolor con amor”, a cargo de la psicóloga Pina Piña, allá por el Centro de Convenciones. El viernes 6, a las 19 horas, se abre el foro de conversaciones que han denominado “compartiendo mi historia”. Este evento, regresa a la “Gata Foro Bar” y como los anteriores, la entrada es gratis. Para el sábado se programó una rodada y taller de mecánica básica. Es un recorrido de Marina Vallarta al punto donde se une la avenida Francisco Medina Ascencio y el libramiento, sitio ya denominado Parque de Las Mujeres. El calendario de actividades incluye para el sábado la obra de teatro “Margaritas con sabor a pólvora”, creación de Roberto Robles y bajo la dirección de Ramiro Daniel. La Obra será en las instalaciones de Incanto Vallarta por la calle Insurgentes 109 y se fijaron precios por boletos de 150 y 200 pesos. A las ocho de la mañana del domingo se llevará a cabo el Memorial para Víctimas de feminicidios en el parque de las Mujeres y también se declamará un poema y se colocarán ofrendas. El programa se clausura con la marcha “vivas las queremos” del crucero del Sams hasta el ya citado parque de Las Mujeres, con tres contingentes: familiares de víctimas, mujeres y atrás los hombres.******Investigadores en cuestiones de violencia de la UdeG y Ciudades del contra la mujer concluyen que la capital del estado es una ciudad hostil para las mujeres. Sus estudios hallaron que en el 83% del territorio de la ciudad se genera violencia comunitaria contra las damas y solo en el 17 % ofrece condiciones de seguridad.*******La noche del martes se reportó el fallecimiento de Ignacio Cadena Beraud. Nacho Cadena ya era considerado una celebridad del mundo social y empresarial local. Su fama creció, cuando en su restaurante La Leche secuestraron a los hijos de Joaquín “el chapo” Guzmán en agosto de 2016. Se instaló en Puerto Vallarta a mediados de la década de los 80 para administrar los desarrollos Los Tules y los dos hoteles Fiesta Americana, propiedades acreditadas a los hermanos Javier y Eduardo Cordero Staufer. Nacho “el niño del ropón”, fue cuñado de Arcadio “Cayo” Valenzuela, un empresario sonorense señalado de supuestos nexos con narcotraficantes. Cuando uno de los dos hoteles Fiesta Americano cambio de nombre, el restaurantero se quedó como aparente dueño y llegó a ser presidente de la Asociación de Hoteles y estuvo al frente del Fideicomiso de Turismo, recién desaparecido por decreto del gobernador Enrique Alfaro.
