De acuerdo a estudios que se realizan en CUCosta revelan los impactos también por al uso irracional de los recursos y los cambios de usos de suelo
Coordinador Maestría en Ciudad, Cambio Climático y Resiliencia, en el Centro Universitario de la Costa, de la Universidad de Guadalajara, Julio César Morales Hernández, aseguró que la severa sequía que se ha registrado en el país, es uno de los efectos del cambio climático, que afecta directamente a los ríos de los municipios de Puerto Vallarta y Bahía de Banderas.
A través de un comunicado, el investigador afirmó que a través de los estudios que se han realizado en la Región de Bahía de Banderas, especialmente en Puerto Vallarta, se ha percibido de manera drástica los efectos de sequía.
Y aunque dijo que en general no se quiere aceptar esta difícil situación, se puede medir con el cambio de uso de suelo, y al final en deforestando en muchas regiones.
“Hemos notado que el problema no es solamente la cuenca del río Cuale, Pitillal y Ameca, que están por debajo de su cauce, sino también por el crecimiento urbano. No estamos en contra de que se desarrolle turísticamente, pero no se toma en cuenta las consecuencias del uso de los recursos naturales y se ve reflejado en el abastecimiento del agua, más servicios, tierras para el cultivo”, detalló.
El cambio climático, en los últimos años ha incrementado en virtud de las actividades donde el ser humano ha influenciado. Y se puede apreciar en la parte alta de la montaña donde ya no hay filtración de agua, que pueda mantenerse una temperatura en algunas regiones.
Por lo que los efectos se aprecian en la erosión del suelo. En este sentido, Morales Hernández comentó que el cambio de uso de suelo, propicia que los mantos acuíferos ya no se rellenen, de manera que el agua se va directamente hacía el mar.
Lo que hace la población, es que las zonas que antes eran agrícolas, ahora son zonas urbanas y es una problemática que ya se aprecia en la ciudad, incluso con las altas temperaturas.
Además, el investigador comentó que la presencia del fenómeno del “Niño”, de fuerte a moderado, con pocas lluvias es un escenario que debe preocupar y ser tomado en cuenta con medidas de mitigación, ante la sequía que se presenta.