La periodista María Antonieta Flores Astorga presenta una investigación sobre las principales modalidades de esos ilícitos y sus devastadores efectos en las víctimas
Con la intensión de concientizar sobre la grave situación del abuso infantil en Puerto Vallarta, se presentó el libro de la periodista la periodista María Antonieta Flores Astorga, «La bestia que devora a los niños», con el objetivo de hacer un llamado a denunciar los abusos, acosos y violaciones hacia los niños.
Asimismo, a que se haga haga conciencia entre los padres de familia y los profesores, para estar vigilantes de la seguridad cibernética y de cualquier señal de alarma que expresen los pequeños.
Evento organizado por el Observatorio Turístico Integral (OTI) en el auditorio “Armando Soltero” del Centro Universitario de la Costa (CUCosta) Jorge Villanueva Hernández, integrante del Consejo Directivo del OTI, destacó la problemática que este abuso representa para este destino turístico.
En el libro, la escritora explica el por qué y el cómo, el Abuso Sexual Infantil (ASI) aplasta y aniquila la inocencia de miles de niños, «calladamente en todos los rincones del mundo, convirtiéndolo en un problema global, en manos no de una, no de dos, de cientos de redes de la delincuencia organizada que están engrosando sus arcas, comercializando a los menores, por muchas vías».
Se explicó que desde hace más de diez años, la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico, OCDE, ha venido afirmando que México se encuentra en el primer lugar en el mundo, en abuso sexual contra
“Este libro no se trata solamente del recuento de daños, ni de la repartición de culpas. Se trata de poner sobre la mesa, la responsabilidad que tenemos todos, como sociedad, de proteger a nuestra infancia”, expresó conductora del programa de periodismo de investigación Para Tomarlo en Cuenta, en el Canal 44 de la Universidad de Guadalajara,
A los pederastas se les hace sencillo secuestrar, maltratar, manipular a los menores, hasta convertirlos en víctimas de su propio deleite y aprovecharlos luego como mercancía. Todo, porque hay un entorno de impunidad generalizada, destaca Flores Astorga.
«En el mundo real sucede en ese cálido espacio donde están los que dicen amarlos: el hogar. Los familiares son los principales abusadores sexuales. Es en casa, donde se está cometiendo el grueso de estos delitos en una estadística que no se mueve mucho, entre el 70 y 90% de los casos contra niños, niñas y adolescentes», acotó.
Dijo que uno de los temas que aborda en su libro es cómo los pederastas han extendido sus tentáculos a la WEB “n un país donde 21 millones de menores entre 6 y 17 años conectados a internet, según la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares, ENDUTIH. Internet, un arma de dos filos. El riesgo está también ahí, y los padres de familia, no se han dado cuenta”
Explicó que todo empieza con el engaño. Con la escasa, o nula supervisión de los padres, sin filtros adecuados, miles de niños “los están convirtiendo en víctimas, seduciéndolos a través de internet”.
Así se presentó «La bestia que devora a los niños. Abuso sexual infantil: pornografía, delitos sexuales por internet, empresarios y miembros de la Iglesia violadores, y autoridades cómplices» un estudio sobre las principales modalidades de esos ilícitos y sus devastadores efectos en las víctimas, revelando nombres, estadísticas y testimonios.
Para finalizar, la autora de la investigación instó a no tener miedo de abordar este tema del ASI. Una información útil para todos, padres de familia, maestros a toda la sociedad.