CONTEXTOS
Gerardo Sandoval Ortiz
Hace dos semanas, en la búsqueda de alguna respuesta para responder a un lector la pregunta de quién era el dirigente local del MC, de si Susana Rodríguez Mejía, se mantenía al frente del MC, tropezamos con dos publicaciones en redes sociales de la representante del gobernador al lado del ex alcalde interino Rodolfo Domínguez Monroy y de Víctor Bernal Vargas, ex aspirante naranja a la alcaldía.
La jugada observada el Día del Niño ocurrió justo cuando se ha advertido la presencia en el municipio de José Antonio Pinto Rodríguez, identificado como operador del ex alcalde Ramón Guerrero Martínez, quien realiza tareas políticas para posicionar al grupo del motejado como “el mochilas”.
El trio señalado Rodolfo-Víctor-Susana, puso por delante los colores del Movimiento Ciudadano en su reaparición. En eventos, uno en la colonia Independencia y el otro en la colonia Volcanes, la más remota de El Pitillal, repartieron obsequios por el Día del Niño.
Desde aquel sábado 30 de abril y en las dos siguientes semanas, la publicación causó furor, pero también algunos ataques de cólera, en un sector del MC que tomaron los eventos como un anticipado movimiento para tomarle ventaja a otros grupos del partido.
Después de algunas consultas a buenos amigos del MC podemos concluir que en dicho partido se han realineado tres grupos y cada uno intenta tomar fuerza para demostrar su músculo y llegado el momento de las definiciones de candidaturas, reclamar candidaturas, para alcalde y regidores. El de Dávalos Peña es un grupo. De sus principales figuras destacan la ex abanderada a la alcaldía Guadalupe Guerrero Carvajal, Diego Franco Jiménez y otras piezas que en las dos últimos administraciones se desempeñaron en cargos de primer nivel.
Ver de la mano de Susana Rodríguez a Víctor Bernal y a Rodolfo Domínguez constituyó una sorpresa para muchos leales a la causa naranja. No debería ser, y no lo es, si se toma en cuenta modo y circunstancias en las que le fue retirada la “candidatura” al contador Bernal Vargas, hace ya dos años.
Hacía ya dos años que no teníamos una charla con Víctor Bernal. Aunque breve, lo saludamos el viernes en el cumpleaños del periodista Jorge Olmos. El ex funcionario municipal se mostró interesado en hablar de política y no hubo forma de rehusar el tema. Es de los que piensa que como oposición deben salir a la calle y hacer trabajo político y social y si los demás, no quieren hacerlo, él aceptó la invitación del partido, de Susana Rodríguez.
Las anteriores son palabras que no se le deben atribuir al aludido. En sus palabras, dio a entender que si los regidores del MC, si Arturo Dávalos u otros, deciden no participar, él está dispuesto a trabajar.
En el MC, los de abajo, consideran que es momento de salir a la calle y abanderar las demandas de la ciudadanía y por ello reprochan a sus principales figuras. Que “por estrategia”, los aludidos consideran que no es el momento apropiado. Es ahí donde aparentemente han chocado piezas que son ( ¿o fueron?) del mismo grupo.
Quienes consideran que el Rodo y Víctor Bernal se han ido por la libre y dado la espalda al grupo que le habían jurado lealtad hasta el último proceso electoral, saben las razones apuestas propias puede generar grandes motivaciones. Los dos mantienen vivas aspiraciones personales parcialmente satisfechas en su militancia con el grupo davalista. Los dos persiguen una meta, la oportunidad de la candidatura negada el año pasado.
Uno de los comentarios obtenidos en el transcurso de la semana pasada, insinuaba que el hijo del malogrado Rodolfo Domínguez Valle y Víctor Bernal se asociaban al enemigo, que su jugada los acercaba a “el mochilas”. Un amigo regularmente informado en el tema nos afirmó con categoría que en realidad, quienes han aceptado las invitaciones de participar en ciertos eventos organizados por Susana Rodríguez lo hacen en calidad de militantes “independientes” de grupo. Independientes, en efecto, de Dávalos pero sobre todo de Ramón “el mochilas” Guerrero.
Un dato a considerar es de vital importancia para entender las jugadas del tablero local naranja. Cuando en la tercera semana de marzo, el gobernador Enrique Alfaro reunió a Dávalos, Ramón Guerrero, Lupita Guerrero, Diego Franco y Susana Rodríguez, a todos con aspiraciones les dio luz verde para salir a la calle y buscar apoyo popular. Esa guía es el manual que mueven a los “adelantados”.
Con lo anterior veamos el reposicionamiento del político de Ayutla. Desde el año pasado supimos que el ex regidor, Adolfo “el grinch” López Solorio había aceptado la encomienda de reorganizar las fuerzas mochilistas del municipio como un primer paso para preparar su retorno. “El grinch”, había desertado a proyecto de Luis Munguía, dentro del MC (antes de saltar a Morena y luego al PVEM) y abrazó la causa davalista desde octubre del 2020.
Cuando Ramón Guerrero se alistaba desde la diputación local por el PAN a buscar la candidatura a alcalde, fincó residencia en un edificio de Amapas, propiedad de Armando Rodríguez Pedroza. Como alcalde (2012-2015) ya se había mudado al exclusivo Marina Vallarta. Al día de hoy, nos dicen que ha terminado de construir una casona en Las Palmas, de donde es nativa la dama con la que contrajo nupcias en fue alcalde.
Hasta este párrafo no hemos citado a dónde se mueve el otro ex alcalde interino, Jorge Antonio Quintero Alvarado. Mantiene profundas ligas con Dávalos pero sabemos que ha aceptado las invitaciones que a su oficina le ha hecho llegar Susana Rodríguez. Quien sostenga que ha decidido apuntarse a los “independientes”, acercarse más a “el mochilas” y poner distancia a Dávalos, podemos caer equivocarse.
Cuando los eventos por el Día del Niño, Susana Rodríguez incurrió en un grave error al restringir los invitaciones a unos y excluir a otros. Eso generó suspicacias y desconfianzas, amén de sospechas de que “la güera” se sometía al “mochilas”, respondía a este grupo y a su juego habían caído sus estelares invitados, el Rodo y Víctor.
En la agenda de Susana Rodríguez para este lunes 16 de mayo, destacaba un agasajo a las madres por si día en El Pitillal. Por invitación o no de la organizadora, se esperaban nuevas asistencias, lo que daría pluralidad y pondría punto final a las deudas de la posición de la todavía dirigente del MC. (En este punto, habría que añadir que los mandos estatales del partido se han propuesto cambios en la coordinación local del partido).
Y ya por último, este fin de semana el rancho de los Arreola será sede de otra fiesta familiar de Ramón Guerrero. Todo aquel consultado al respecto consideró que ahí pudiera darse un discurso político, que “el mochilas” anuncie su regreso a Puerto Vallarta a disputar lo que cree es suyo, la candidatura la alcaldía en el 2024.
Revolcadero
Por cierto, además del ofrecer del atrasado agasajo a las madres de El Pitillal por el 10 de mayo, y la fiesta de Ramón Guerrero en rancho de los Arreola de Las Juntas, cuyo anfitrión Toño Arreola es el padrino de bodas del “mochilas”, hay un tercer evento marcado como de mucho interés para los naranjas patasaladas. Es la Marcha contra la Homofobia que partirá frente al hotel Sheraton hasta la plaza de armas o Arcos del malecón. Varios activistas de los movimientos lésbicos gay y trans, los que también se sienten atraídos por la política se movieron con cercanía en el MC pero ahora titubean. Se sintieron decepcionados ahora que los diputados del Movimiento Ciudadano previo a la sesión donde se aprobó el matrimonio igualitario el jueves 7 de abril, pidieron votar en secreto. Citemos Juan Carlos Rodríguez Robles, un abierto promotor del MC que voltea a nuevos horizontes desde aquel momento que se sintió vetado por notables miembros der “las monitas” de Dávalos por participar un desfile del orgullo gay con indumentaria de mujer. Le impidieron ser delegado municipal y por eso, por homofóbicos, no los perdona. Y como mantiene vivos su suelos, en una de esas le brinca a Luis Munguía y se viste de verde.****** Víctor Manuel “el cachis” Aréchiga, aquel delegado municipal de Ixtapa removido en un mes de mayo por haberse alineado a Ramón Guerrero y jugarle a los contras en el gobierno de Arturo Dávalos Peña es uno de los que desde hace meses tuvo acercamientos con “el grinch”, Adolfo López Solorio. Sin embargo, a últimas fechas este muchacho parece pretender otra vez jugar por dos carriles. Nos platican los amigos del “cachis” que presume haber platicado con Chuyito Michel, el vástago del alcalde Luis Michel, y que ya tiene acuerdos, privados e íntimos, para revestirse de moreno. En Ixtapa, también presume: “soy “asesor de doña Manuela”. Pero, nadie le cree. La evidencia pública disponible son sus publicaciones en redes sociales donde exhibe simuladas relaciones de afecto con la familia de la delegada municipal, Doña Manuela Ramos. Aprecios simulados porque esas relaciones llevan a la estadía del “cachis” en San Diego y su deuda por ciertas compras que dejó al regresarse a Ixtapa.****** Nos escribieron una gran historia que de momento, para no cansar a nuestros lectores, la resumimos: “El que pidió protección y que estuvo protegiendo a la del DIF, la detenida y al marido, es el doctor director de servicios médicos municipales. Tú lo conoces”. ¿De quién, de quiénes habla nuestro interlocutor? Se refiere a Iris Guadalupe, la jefa de Recursos Laborales de la oficialía Mayor Administrativa detenida el mediodía del viernes 13 por agentes de la Fiscalía de Justicia del Estado por ser presunta responsable del homicidio de su ex esposo. Su marido… pues es el “licenciado”, Luis Lorenzo Melchor Rodríguez, el mismo que fue perseguido por miembros de una familia que se dijo agredida en el camposanto de Ixtapa el martes 4 de enero. Por aquella reyerta Melchor también había perdido su chamba como subdirector de jurídico del DIF. Por tratarse de matrimonio joven, preguntamos qué los unió con el médico Salvador Flores, conocido como “el charolo” y la respuesta fue una obviedad: “el charolo los jaló para presumir tener un grupo político propio y fuerte. Del médico, al que conocimos como un entregado y dedicado matraquero del PRI, les quedamos a más historias.
