El presidente del Consejo Coordinador Empresarial enlisto algunas problemáticas por atajar en la región turística
Si bien Puerto Vallarta y Riviera Nayarit han demostrado una fuerte resiliencia ante los embates de la pandemia, es necesario que salgan de su zona de confort y trabajen en temas pendientes como la conurbación, la responsabilidad social, el abuso sexual a menores y el crecimiento desordenado, señaló el presidente del Consejo Coordinador Empresarial de la región, Arnulfo Ortega Contreras.
Al participar en el conservatorio empresarial “Reactivación económica en el turismo”, que organizó el Consejo de la Comunicación “Voz de las empresas”, el empresario destacó la rápida recuperación del destino después de la contracción que ocasionó el Covid-19, pues conforme disminuyen las medidas de prevención se han dinamizado los flujos de visitantes con mayor prontitud con respecto a otros destinos.
Agregó que también contribuye la promoción conjunta de empresarios y gobierno en ambas entidades y el respeto con que ha trabajado en los protocolos sanitarios.
“Somos exitosos, pero no conformes, queremos continuar con este éxito y para ello hay que seguir trabajando en unidad empresarial, reforzando las medidas sanitarias dentro y fuera de nuestros lugares de trabajo. Hay que recordar que el turismo ha sacado a flote la economía del país, y esta vez no será la excepción, pero no podemos relajarnos”.
Subrayó que un reto de Puerto Vallarta y Bahía de Banderas es trabajar como un solo destino turístico, fortaleciendo el desarrollo inter municipal y desarrollando un Plan Integral de Desarrollo Turístico que fortalezca las estructuras turísticas, la gestión, las políticas públicas y así aminorar los problemas, efectos e impactos que se generan de manera común.
Abundó que es indispensable reestructurar al turismo con una visión global, más humana, sostenible y con perspectiva de género para fortalecer la economía, el bienesta