Puerto Vallarta y Riviera Nayarit se han ubicado desde hace muchos años en la preferencia del mercado inmobiliario y la pandemia no ha supuesto un freno para ello, de tal manera que firmas de relevancia internacional como la agencia Ryan Donner y Asociados destaca mediante un estudio que son lugares muy atractivos para invertir.
Se trata de una agencia miembro de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), con diferentes certificaciones nacionales e internacionales, que realiza análisis de mercado, asesoría con contratistas y proveedores, asesoría legal y fiscal en materia inmobiliaria, estrategia de precios, inmersión al mercado extranjero, desarrollo e implementación de estrategias de marketing inmobiliario.
Detalla en su análisis que el número de ventas en Puerto Vallarta y Riviera Nayarit avanzó de 1,137 en 2018 a 1,909 en 2021, dicho en billetes, de 350.7 millones de dólares en 2018 a 704.1 en 2021, es decir, casi se duplicó en esos años que abarcan en su mayoría lo que va de la pandemia.
Detalla que ha aumentado la demanda del mercado extranjero por condominios, en tanto que el mercado nacional se inclina más a las casas, pero algo que llama la atención es que la venta de departamentos en zonas determinadas se está desarrollando a “velocidades históricas”.
Y llama la atención de que, a pesar de que los últimos años se ha dado un boom en la construcción de edificios, que para los especialistas en urbanismo se ha dado en forma irregular, la firma considera que todavía existe un corto inventario registrado en Puerto Vallarta que se refleja en el incremento de los precios, por lo cual desarrolladores y compradores minoristas están volteando a Bucerías, La Cruz de Huanacaxtle, Sayulita y Rincón de Guayabitos.
En la zona Centro o en la Zona Romántica el precio promedio por un condominio promedió el año pasado en 394 mil dólares, pues la demanda es muy superior al inventario. Por ello también está creciendo la demanda en Versalles, Fluvial, Zona Hotelera, Marina Vallarta, así como en Riviera Nayarit en sitios como Nuevo Vallarta, Bucerías, La Cruz de Huanacaxtle, Sayulita, San Pancho, Lo de Marcos y Rincón de Guayabitos, dnde se espera que en el mediano y largo plazo tengan muy alta plusvalía.
Una propiedad frente al mar tiene un precio promedio de poco más de un millón de dólares en la bahía.
Concluye la firma que “el corto inventario es un beneficio para los desarrolladores que trabajan con nosotros, pues los compradores no quieren dejar pasar la oportunidad y toman decisiones rápidas pero calculadas, sobre todo el mercado estadunidense y canadiense, que lidian constantemente con transacciones a estas velocidades y desconfían de los vendedores; prefieren hacer transacciones a través de agencias establecidas, es una característica cultural en su forma de hacer negocios. El mercado actual en Puerto Vallarta no es para pensar, es para actuar”.