Tamaño de texto


Gerardo Sandoval Ortiz |

Llueven reclamos por promesas incumplidas de Óscar Pérez

CONTEXTOS

El pasado jueves 14 de este mes en curso, en el edificio de la UNIRSE, una antigua empleada municipal se nos acercó para echar sapos y culebras contra Oscar Pérez, Ramón Guerrero y Juan Ignacio Calderón Ibarría. Su irritación era por una razón: había sido contratada por los funcionarios estatales y después de tres meses de trabajo no le han pagado ni un solo peso.

Oscar Ernesto Pérez Flores es el actual director estatal de la Secretaría de Asistencia Social del gobierno del estado. Sus pininos de servidor público los inició como secretario particular de Ramón Guerrero cuando éste fue presidente municipal. A éste le debe su actual chamba en Guadalajara. La esposa de Oscar Pérez, María Inés “Mané” Díaz Romero es regidora por obra y gracia del propio Ramón Guerrero, a quien algunos le llaman “la juanita del mochilas”.

Bien, advertidos de que Oscar Pérez desempeña un cargo en el gobierno del estado por “méritos” y lealtad hacia Guerrero Martínez, cuando echaron a andar programas sociales como “mi pasaje”, el jefe superior le autorizó a Oscar Pérez contratar varias decenas de trabajadores y apoyar en programas que opera el gobierno estatal.

Nos han mencionado que tales empleados temporales dan ayuda a la entrega de materiales y útiles escolares, uniformes, mochilas, zapatos. Apoyan en la entrega de los pases o boletos para el transporte urbano, el denominado Mi Pasaje. También se les han visto en el programas Recrea.

La antigua empleada municipal nos decía el jueves que ese mismo día había acudido a preguntar si ya les habían pagado. En algún momento bajó la escalera del edificio Calderón Ibarría, con sombrero y botas. Este funcionario es el encargado de operar los programas sociales y también ha puesto oídos sordos al reclamo de que les paguen.

No se sabe a ciencia cierta cuántos trabajadores fueron contratados por Oscar Pérez y demás subordinados. Nos informaron que son 300 personas los “encabronados” porque tienen tres meses trabajando y no les han pagado.

Dos fuentes distintas nos han dado una cifra respecto al sueldo. Que les iban pagar por día 200 pesos y que les prometieron tres mil pesos mensuales y su bonificación respectiva.

Bien, más allá del tanto de sueldo prometido, lo relevante radica en la burla de que son objetos los desdichados empleados temporales. Oscar Pérez, Ramón Guerrero y “el junior” Calderón Ibarría, se burlan de ellos. Los engañaron y ahora se les esconden, una vergonzosa y comodina forma de eludir su responsabilidad, de cubrirles un salario ya ganado con su trabajo.

El jueves 24 de octubre, una dama que se identificó como Ani Martínez le hizo un reclamo público y directo a Oscar Pérez por su incumplimiento. Fue a primera vez que supimos que existían empleados “explotados” por los subordinados de Ramón Guerrero contratados y que no reciben el pago prometido. De aquello ya pasó un mes y el jueves nos enteramos que todavía no les pagan.

Le escribió Ani Martínez a Oscar Pérez: Licenciado Oscar, disculpe, cuando nos van a pagar a los de Secretaría; ya van 3 meses que estamos apoyando al programa “mi pasaje” y no nos han pagado. Solo recibimos malos tratos de parte de Miguel Rico y usted no nos resuelve nada No es justo que esto esté pasando. ¿O hay que hablar con el gobernar? Nosotros queremos que usted nos apoye.

Como respuesta, de Oscar Pérez vino solo una lamentación. “Como te hemos comentado en repetidas ocasiones, el proceso de pago lo lleva otra dependencia en la cual desafortunadamente nosotros no tenemos injerencia, todas y cada una de las veces que nos han comentado del tema hemos realizado las gestiones que están a nuestro alcance para resolverlo, hasta el momento sin éxito, al igual que ustedes lamentamos la situación y estamos a la espera de recibir una respuesta afirmativa del área correspondiente”.

Ignoramos si Ani Martínez logró cobrar esos tres meses que reclamó el 24 de octubre al ex secretario particular de Ramón Guerrero.

Oscar Pérez, y también “el mochilas” y Juan Calderón Ibarría se burlan de quienes han sido contratados y eluden dar la cara a ellos y por ellos. Nos han hablado pestes de ellos y consideramos que es justa su exigencia de recibir el pago por haber sido ellos, Oscar Pérez a la cabeza, quienes los contrataron a nombre de la Secretaría de Asistencia Social del gobierno del estado. Cuando estaban negociando el sueldo, fue Oscar Pérez, con la autorización de Ramón Guerrero, el que cerró acuerdo y contratación.

Sino todos, muchos de los contratados para apoyar en la entrega de útiles escolares, dotaciones de pasaje de transporte y urbano, se ganaron la chamba realizando en algún momento trabajo político para el grupo de Ramón Guerrero. Es decir, se trata de operadores políticos, activistas de bajo perfil reclutados por el grupo político de “el mochilas” adoctrinados para promover en su momento al diputado Luis Munguía.

Logramos contactar el fin de semana a un conocido que confía en recibir su paga. Por lo menos a él ya le leyeron la cartilla, de trabajar para Munguía pero primero, tener paciencia y que con Munguía de presidente municipal tendrá chamba de primera y con salario de general.

Tal vez sí, o tal vez no se cumplan las promesas. Lo que nos consta es que hay decenas, quizá 300 trabajadores que han sido engañados por el grupo político que se ha propuesto hacer alcalde a Munguía. Apenas en la pasada campaña electoral, Ramón Guerrero prometió a muchos las perlas de la virgen pero acabó por dar regidurías a las esposas de sus amigos. Ya citamos arriba el caso de “La Mané” Díaz, esposa del susodicho Oscar Pérez pero también está el caso de la regidora Alicia Briones Mercado cuyo mayor mérito es ser esposa de Oscar Domínguez, hermano del ex alcalde interino Rodolfo Domínguez Valle.

Luis Munguía también tiene a su “regidora juanita” personalizada por María del Refugio Pulido Cruz. La suplente de ésta es la esposa del motivador, Ramón Chávez Lara.

Más allá de José Adolfo López Solorio, “el grinch”, Ramón Guerrero y Luis Munguía no hallaron entre sus seguidores a nadie capaz de promoverlo para una regiduría y abrirle espacio y ofrecerles una chamba digna, sino bien pagada, con puntual pago de sueldo. A sus amigos los premian y a la gran masa de sus activistas los dejaron en el desamparo. No deje de ser una grosería que ahora los empleen para apoyos en la entrega de mochilas, de útiles escolares, para la entrega de boletitos para el camión y ni siquiera les paguen.

Revolcadero

La víspera del arranque de la tercera entrega de apoyos del programa Mi Pasaje, Lizeth Rosas preguntaba cuando se entregan la cuota de boletos e n Puerto Vallarta y si ella sería beneficiaria. “La Lic. Bellani se llevó los papeles y pos no se si recibiré. Soy de La Desembocada” le dijo a Oscar Pérez. Este le prometió que pediría la contactaran y le dio las gracias. Una semana después, Lizeth Rosas le mandó otro mensajito a Pérez Flores. “Pues nada, nadie me habló. Ni msj”. Oscar Pérez lo leyó el recado pero jamás le dio respuesta. Para ese momento ya había transcurrido una semana y se había decepcionado de Oscar Pérez, de Ramón Guerrero, de Juan Ignacio Calderón Ibarría. Estos son los pilares del equipo político que alimenta el proyecto llamado Luis Munguía. ****** La semana pasada, en el restaurante México Late, por ahí a espaldas de la central de autobuses se fueron a desayunar un grueso grupo de ejidatarios de Ixtapa. Por lo menos fueron 15 asistentes. A la cabecera de la mesa se apostó el ingeniero Marco Antonio Mora Ortiz. Los amigos le apodan “el güero”. Ocupó ese lugar a sabiendas del tema de conversación del grupo. Citamos algunos desayunadores: Lino Ortíz Muñoz, Felipe “Macoy” Fernández, Nacho Ramírez, Jorge “Tito” Medina Pérez, Zeferino Ramírez Colmenares, Silvano “Vano” González González, Carlos “Serranito” Alvarez. Por ahí vimos a dos damas y una de ellas nos pareció ser Maria Encarnación Gallegos, una conocida dama Ixtapense a vecindada en Puerto Vallarta, ejidataria y exitosa dueña de una florería en Bucerías. ******* Bien, aquel selectivo grupo de ejidatarios acordaron proponer a Marco Antonio “el güero Mora” como candidato para las elecciones que habrán de celebrarse diciembre del 2020. Preguntamos razones de tal acelere a mas de un año de convocar a elecciones para la mesa ejidal y como respuesta, uno de los asistentes nos dijo “Si Arturo ya dio a conocer su gallo para Vallarta porque yo no…”. Ahí mismo completaron la planilla. En la planilla, María Encarnación Gallegos será la secretaria y Nacho Ramírez el tesorero, en tanto que Tito Medina será el presidente del Consejo de Vigilancia. Si algo le sobra a este trabuco es experiencia pues se trata de lo más parecido a meros dinosaurios del ejido. María Encarnación ya fue tesorera del ejido en el periodo de Oscar Pimienta Torres. Nacho Ramírez ya fue presidente, secretario y hasta presidente del Vigilancia, el último cargo, cuando Engelberto Pelayo fue presidente. Y Mora Ortiz fue secretario también en la era de Engelberto Pelayo y tesorero con Zeferino “el chéfero” Ramírez. A eso unos le llaman experiencia y nosotros en este espacio, verdaderos dinos del ejido. Eso sí, varios son nuestros amigos.