El Día del Médico, entre la heroicidad y el aprendizaje al dar la batalla en la primera línea contra el coronavirus también con frustración por el relajamiento social
Parafraseando al escritor español Arturo Pérez-Reverte se podría decir que así llegan los médicos este 23 de octubre para celebrar su día: Los héroes cansados.
O por lo menos así lo expresó el doctor Núnez Gómez que este Día del Médico su gremio llega cansado tras más de siete meses de dar la batalla n la primera línea contra el coronavirus.
“La verdad llegamos cansados”, expresó el director de la clínica del ISSSTE en Puerto Vallarta, cargo que Núnez Gómez apenas había asumido un par de semanas antes cuando se registraron los primeros casos de Covid-19 en Jalisco “una pandemia que nunca imaginábamos”.
En medio de la heroicidad de sus colegas durante estos meses, Núnez Gómez, pone de manifiesto que esa valentía para estar en la primera línea luchando contra el Covid-19 es generalizada entre todo el personal de salud, enfermeras, camilleros, laboratoristas, etcétera.
Los héroes están cansados, pero siguen librando cotidianamente esa batalla porque también ha dejado aprendizaje, después del miedo en un gremio en que también abundan hipertensos, diabéticos, tabaquismo y adultos mayores que debieron enfrentar sus temores con un virus desconocido: el Sars-Cov-2. En una lucha lenta y dura, larga también en lo que no haya una cura o una vacuna, puntualiza.
Con una amplia trayectoria en instituciones médicas, el también ex director de la VIII Región Sanitaria de la SSJ, relata del miedo y la incertidumbre entre el personal de salud que puso a prueba la vocación de algunos, sin embargo por algo estudiaron medicina e hizo una analogía con los soldados en una guerra, y en esta guerra contra el coronavirus a los facultativos les toca estar en la primera línea y hay que dar la batalla.
Así como hay héroes hay desertores
Y como en todas las guerras, así como hay valentía de los héroes también hay desertores o aquellos que emprenden la retirada frente al enemigo.
Situación que ilustra al mencionar a un colega que tiene 80 años de edad, el doctor Isidro que aun con el decreto que a los adultos mayores les pide aislarse y no presentarse a dar consulta, su colega pide le permitan ir a dar consulta, “Isidro dice que si le puede dar Covid-19 aún en su casa, mejor que sea haciendo lo suyo que es dar consulta”.
En contraste, Núnez Gómez mencionó a un internista que sin padecer ninguna enfermedad crónicodegenerativa y tener menos de 60 años, recurrió al sindicato para evadirse de atener a los pacientes. O sea como en todos los gremios hay de vocación, responsables y también irresponsables que ante esta pandemia dejaron de lado el juramento hipocrático.
En la tragedia se humanizan
El también ex subjefe de Servicios Médicos Municipales, destaca que con la atención a pacientes con el Sars-Cov-2, percibe como se han humanizado en la atención hospitalaria, esa que reconoce que lamentablemente también se deshumaniza y es fría la atención, pero la terrible muerte en la soledad del aislamiento
“Una soledad que no es precisamente porque sean personas sin familia o alguien que no vele por ellos; sino porque no puede estar a su lado su familia por riesgo de ser contagiados, más cuando se trata de adultos mayores o con alguna enfermedad crónico degenerativa. Hay médicos y enfermeras que sabiendo del riesgo se acercan para dar una palmadita o un gesto de aliento a esos pacientes”, manitestó Núnez Gómz.
El galeno afirma que hay que se debe crecerse en el castigo porque si los profesionales de la medicina no lo dan la batalla contra esta terrible infección, quién lo va hacer se pregunta y enfatiza que “le toca a los doctores”.
Frustración por el valemadrismo del relajamiento
Rafael Núnez Gomez, tiene un nombre de origen hebreo que significa «El Dios ha sanado» o «La medicina de Dios» que el santoral marca el 24 de octubre, un día después de este Día del Médico en que los héroes llegan cansados. Pero tener un nombre de arcángel no es impedimento para palabras altisonantes cuando habla de la frustración ante los indolentes e inconscientes que pese el repunte de los contagios en Puerto Vallarta, así como en la región que se están dando contagios incluso en localidades alejadas como en Tomatlán o que hacen que la clínica-hospital del ISSSTE en Puerto Vallarta esté al 50 por ciento de su capacidad en el área Covid-19.
Con los riesgos de un rebrote cuando todavía no se supera la pandemia, Núnez Gómez expresa los sentimientos de frustración por los “valemadristas” con el relajamiento social que se percibe ya en Puerto Vallarta, cuando el personal de salud con heroicidad están al pie del cañón enfrentando el desafío, porque esos héroes también tienen familia por la cual deben velar y no se vale que esos esfuerzos que hacen no tengan la reciprocidad por esa sociedad para aquellos que están dando la batalla, sin dejarse vencer por la ansiedad, el desgaste físico y emocional o el miedo frente al coronavirus.
EL DATO
El Día del Médico en México se celebra el 23 de octubre porque la Convención de Sindicatos Médicos Confederados de la República estableció esta fecha en 1937, en honor al doctor Valentín Gómez Farías, quien inauguró el Establecimiento de Ciencias Médicas en la Ciudad de México ese mismo día, pero de 1833.
En tiempos de coronavirus hoy más que nunca hay que revalorar el papel de los médicos que es impredecible.
Gracias por su heroicidad.