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Gerardo Sandoval Ortiz |

Los frentes que deja abiertos López Obrador desde Sinaloa a Veracruz y por la reforma judicial

CONTEXTOS

 

 

 

Este domingo pasado, un buen amigo y periodista veracruzano nos envió un breve video en donde se puede ver al presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador evadir con un cabeceo un artefacto que le lanzaron de atrás de un grupo de empleados del Poder Judicial que le gritaban “dictador”.

No transcurrió mucho tiempo cuando el pueblo sabio difundió una imagen de una persona con ropaje de Siervo de la Nación, y con nombre, lo culparon de haber quien lanzó la botella de agua a la comitiva de Amlo, el gobernador de aquella entidad Cuitláhuac García y varios oficiales de la Secretaría de Marina.

A raíz de la felonía del clan Los Yunes a la oposición. Veracruz está que arde. La gobernadora electa, Rocío Nahle amenaza con renunciar a Morena y declararse “gobernador independiente” si su partido recibe y le abre campo a los Yunes. Nahle amenaza con reactivar los procesos judiciales al clan Yunes y abrir nuevas carpetas judiciales contra familiares y amigos de sus odiados enemigos políticos y personales.

El caso ocurrido el domingo allá por el golfo es clara muestra de que las escaramuzas que amenazan la armonía de la elite morena tienen origen en las altas esferas del morenismo.

¿Y quien es ese que lanzó la botella López Obrador?, preguntamos. “No lo conozco. Parece es que es militante de los de a pie que le dieron aire…”, nos contentó el amigo periodista.

La irritación de la gobernadora electa del cuarto estado con más electores tiene explicación. Acusa al tabasqueño ex titular de la Segob, Adán Augusto López Hernández, de haber negociado a sus espaldas con los Yunes y no haber tenido la gentileza ni la educación de enterarla de los acuerdos con los Yunes. “Si hizo sus acuerdos con Yunes Linares, que se los cumpla él porque en Veracruz no se les va a perdonar y se las hará pagar sus campañas de mentoras y difamación”.

El fin de semana estuvimos al pendiente de las noticias generadas en Sinaloa. Lo que todos llaman “a guerra entre chapitos y mayos” no da tregua. Pero otro conflicto, quizá el dio origen al “secuestro” de Ismael “el mayo” Zambada, presumiblemente por Joaquín Guzmán López, uno de los herederos del imperio de Joaquín “el chapo” Guzmán, amenaza la de por si incierta paz sinaloense.

Es bien sabido que el mismo jueves 25 de julio, cuando el hijo del “Chapo” motejado como “güero moreno” aterrizó en una pequeña pista local en un suburbio de El Paso Texas, asesinaron al ex rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa, Héctor Cuén Ojeda. Días después, “El Mayo” Zambada afirmó en una carta de su puño y letra que al maestro Cuén lo mataron en el mismo lugar donde a él “secuestraron” para entregarlo a la justicia del vecino del norte.

Lo que estamos observando en Sinaloa es una purga entre viejos camaradas formadas en las antiguas ligas universitarias. Los viejos paisanos de Badiraguato, universitarios ambos, exrectores de la UAS los dos, chocaron al incursionar en la política y coincidir ambos a la fronda sombra de un árbol llamado Morena.

Rubén Rocha Moya, como político y como gobernador es un muerto en vida. La comunidad universitaria es por reorganizarse y armarle una rebelión popular. Pero las células universitarias, probablemente son la más débil de las amenazas del gobernador Rocha Moya. Uno de los frentes en guerra, “la mayiza” ha puesto precio a su cabeza y ha empezado por arreciar las movilizaciones para desestabilizar al régimen de la t4 en aquella entidad.

Las células que guerrean a “los chapitos” esta convencidos que Rocha Moya conspiró en la emboscada tendida para atrapar al viejo capo del establo donde nació la lechera Santa Mónica, al sur de Culiacán. Por aquellos rumbos se ha saturado las redes sociales con audios y videos en donde grupos armados lanzan amenazas al gobernador. Lo más decente que le dedican es un respetuoso pedido de que ya se abandone Sinaloa.

En realidad, en Sinaloa ocurre una doble purga. Por un lado, se declaran la guerra las dos facciones que dieron origen y consolidaron al llamado “Cártel de Sinaloa”. Han decidido matarse entre ellos y las autoridades, civiles y militares, han decidido entregarles el territorio y hasta que ellos decidan regresará la paz.

No es chiste ni broma. Así lo declaró el generalote Francisco Jesús Leana Ojeda, comandante de la Tercera Región Militar en ocasión del desfile militar por el aniversario 214 de la Independencia de México. “Depende de ellos que son los que se enfrentan y están cobrando vidas. Nosotros no. Al contrario, estamos evitando que haya confrontaciones” dijo jefe militar del cuartel regional con sede en La Loma Atravesada ahí en Mazatlán.

Pero, amén de la guerra de la llamada delincuencia organizada, el conflicto universitario amenaza con salirse de control. La UAS es una de las comunidades universitarias de mayor tamaño en el país. Es una de esas raras instituciones fundadas en el gobierno de Lázaro Cárdenas lo que explica haber nacido como una “universidad socialista”. Y contra los vaivenes políticos y sus conflictos internos, “caídas” universidades como la de Puebla, Michoacán o Guerrero, permanece intacta y resistiendo a los embates del gobierno en turno, sus hombres han defendido el Sursun versus.

En el verano de 1989, vía el voto universal, llegó a la rectoría el hijo predilecto de El Recreo, el amigo químico David Moreno Lizárraga. Lo postuló la corriente política “M 7”, ligado al faccioso grupo “los enfermos” que principio de la convulsiva décadas años 70 en jaque a la UAS, bajo la falsa creencia de haberse convertido la universidad en una fábrica de burgueses.

Cuatro años después lo sucedió Rubén Rocha Moya, quien ganó la rectoría a través del voto universal. El hoy gobernador había sido dirigente de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México, la organización que aglutina a las normales rurales, entre ellas la famosa normal de Ayotzinapa. Y antes de fundarse el PRD, la socialista UAS se movía en la política local como su brazo político el Movimiento Popular Sinaloense. En los 80 Rocha Moya fue candidato a gobernador y repitió en 1998 postulado por la alianza PRD, PVEM y PT. Por esos tiempos hizo migas con López Obrador a fue a apoyarlo en su campaña a gobernador de Tabasco.

Años más tarde, Melesio Cuén llegaría a la rectoría vía voto universal. En su gestión 2005-2009 reformó la Ley Orgánica. El Consejo Universitario le borró el estatus de “supremo” o lo dejó en órgano de autoridad “máximo”. También modificó los mecanismos de elección de los rectores y direcciones académicos, incluyendo a los integrantes del Consejo Universitario. Desapareció el voto universal y la designación del rector sería a través del Consejo Universitario.

La reforma que en sesión extraordinaria aprobó el Congreso local contempla el regreso del voto universal y borra las reformas impulsadas por Cuén, su declarado enemigo hasta su asesinato el jueves 25 de julio.

Los historiadores presumen que dicha reforma es regresiva y que viejos líderes de “los enfermos”, entre ellos Rocha Moya y Feliciano Castro, su alfil en el Congreso local, intentan toar el control de la UAS.

Para conocer quiénes y que fueron “los enfermos”, el interesado puede remitirse a la historia de grupos y movimientos universitarios del país. En su momento conocimos extraordinarios amigos, como “el gordo” Moreno Lizárraga, hermanos y familia amigos en la zona rural del sur del Mazatlán.

La purga entre los viejos socialistas y comunistas sinaloenses revestidos de morenos, más bien es una confrontación política de amigos y paisanos, una brecha que obedece al insaciable apetito político convertida en guerra de la que solo emergerán perdedores

Y en el otro frente de guerra, la de “la chapiza” y “la mayiza”, puede que uno extermine al otro, pero quienes o quién se declare vencedor resultará tan débil que pudiera ser devorado por otros tiburones que pululan en esos negocios.

 

Revolcadero

 

El fin de semana trascendió otra noticia de sumo interés para vallartenses, para tapatíos y en general, para todos los jaliscienses. La Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación de Guadalajara falló en contra del recurso interpuesto por la ya ex abanderada de Morena y la mega alianza, PVEM, Partido del trabajo, Hagamos y Futuro, Claudia Delgadillo. Esta dama pidió anular la elección del ya lejano domingo 2 de julio acusando que el representante del Movimiento Ciudadano, Pablo Lemus le robó un triunfo que no ha podido probar en dos instancias, el Tribunal Electoral del Estado y en la primera de dos instancias de competencia federal. Claro, resta ir a la Sala Superior pero se antoja imposible que se dicte un veredicto de la satisfacción de la quejosa.****** La elección en Jalisco ha exhibido la consolidada fama de Morena y sus tribus de no saber perder en una elección democrática. Cuando ganan no escatiman elogios e inclusive a los tribunales electorales cuando emiten sentencias favorables a ellos. Hace menos de dos semanas, los quejosos de Morena, Claudia Delgadillo y hasta Chema Martínez, había expresado su palabra de acatar la decisión del TEPJF. Sin embargo, no se dan por vencidos y agotarán la última instancia. A estas alturas del partido, con dos outs del inning 9, ya estamos en espera del out 27. Llevar el juego a extra innings, a muy pocos convence.

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