Tamaño de texto


Gerardo Sandoval Ortiz |

Con dedicatoria al TEPJF la pluralidad política en los gobiernos en Jalisco

CONTEXTOS

 

 

 

El fin de semana, el gobernador Enrique Alfaro y el electo Pablo Lemus Navarro, tomaron por escenario Puerto Vallarta y para divertir a su graderío posaron para las cámaras hasta y recrearon un gracioso romántico columpio tomados de mano. El mensaje que intentaron dar desde la costa, no fue romántico ni telenovelero, fue simular un cambio de estafeta terso y sin ningún tipo de sobresaltos.

La gira de Alfaro y Lemus, que incluyó computadores para maestros, más camiones de transporte urbano, el nuevo muelle de Boca de Tomatlán y la reconstruida primaria “20 de Noviembre”, es lo más parecido a un episodio de una película que separados y por distintas regiones de país protagonizan Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum.

La disputa por la presidencia de la república ya es cosa juzgada y Sheinbaum sucederá a López Obrador. Sin embargo, la gubernatura de Jalisco aún está en disputa debido a la controversia legal interpuesta por quien fue la abanderada de Morena y una mega alianza, Claudia Delgadillo que demanda la anulación de los comicios del 2 de junio pasado.

Alfaro será gobernador hasta el jueves 5 de diciembre ya casi 100 días de la jornada electoral de la que resultó triunfador Lemus, el dúo ha puesto en marcha una campaña mediática para dejar claro quien será el gobernador desde el viernes 6 de diciembre. El mensaje es claro: Lemus será gobernador y Claudia Delgadillo es la derrotada.

Este fin de semana se difundió un desplegado difundido que contiene las firmas de representantes de dos centenares de asociaciones civiles y organismos empresariales. Se destacan entre los demandantes se hallá el Consejo de Cámaras Industriales de Jalisco, el influyente Consejo regulador del Tequila, Coparmex Jalisco, Asociación Mexicana de Mujeres Jefas de Empresa, Canaco Guadalajara, Consejo Agropecuario, Cámara de la Industria de la Radio y Televisión y Consejo coordinador de Jóvenes Emprendedores de Jalisco. Además, destacan instituciones de educación superior, como la Autónoma de Guadalajara y Marista, el ITESO y la Universidad Panamericana. Confederaciones sindicales, como la CTM, la CROM entre otras, también comparten la demanda.

Demandan que se respete el voto de los jaliscienses. En otras palabras exigen respeto a lo expresado por los electores el domingo 2 de julio y en consecuencia el triunfo de Pablo Lemus y además, la presidencia municipal de Guadalajara.

“Jalisco eligió la pluralidad política en los gobiernos”, titulan los firmantes su proclama pública. “Las organizaciones e instituciones firmantes estamos convencidos de que el pasado 2 de junio en Jalisco vivimos unas elecciones en libertad. En Jalisco Claudia Sheinbaum fue elegida como Presidenta de la República y Pablo Lemus fue elegido como Gobernador de Jalisco”, puntualizan.

Depositan su confianza en el trabajo de los tribunales electorales y sin citar nombres llaman a las y los contendientes del proceso que se conduzcan con madurez democrática, que festejen sus triunfos quienes salieron airosos, y que lo perdedores acepten sus derrotas. Conminaron a los tribunales electorales resolver los juicios oportunamente a fin de facilitar una transición ordenada y con certidumbre.

A estas alturas ya se resolvieron las controversias recursos respecto a los legisladores, senadores y diputados federales e inclusive, ya se reafirmó la victoria de Claudia Sheinbaum. Entre esos triunfos ya conformados destaca el de la morenista Laura Imelda Pérez en Tlaquepaque, sentencia que el Movimiento Ciudadano ha dicho respetará. Una de las impugnaciones pendientes por definir es la lucha por la gubernatura, fallo que en cuestión de días o semanas habrá de conocerse.

Al resistirse a aceptar sus derrotas Morena, fortalece su fama de ser un movimiento reaccionario ante las adversidades pero que cuando los cómputos le son favorables los acepta con regocijo. El ejemplo emblemático es el fundador de Morena, López Obrador que acusó se víctima de un fraude electoral en los comicios de 2006, que llamó a una sublevación social y mandó al carajo a las instituciones. En 2018, con las mismas reglas y el mismo árbitro resultó vencedor.

Cuando en las urnas se manifiesta el implacable juicio del pueblo no hay forma de controvertir el proceso. Dicen que en la democracia se gana con un voto de diferencia. Con las debidas proporciones, lo mismo ocurre en los órganos autónomos o en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, uno de los tres Poderes de la República que resiste a ser “conquistado” por el Ejecutivo.

La democracia no es someter uno a los otros. Eso se asemeja a los intentos de imponer un régimen totalitario, propio de la más vulgar de las dictaduras.

En esa gira del viernes pasado, observamos al presidente municipal electo, Luis Ernesto Munguía González integrase a los eventos del gobernador en funciones y el electo, Alfaro y Lemus. Deberemos de considerar que a Munguía se le trató como lo que es, el futuro presidente municipal de Puerto Vallarta. Las mismas atenciones se le brindaron al alcalde interino Francisco José Martínez Gil. Sencillamente. Fue un acto de gobierno civilizado, donde los anfitriones fueron funcionarios estatales ofreciendo las debidas deferencias al actual gobernante local.

Vemos pues que se trata de gestos de madurez política y nada de lo visto rebaja a Martínez Gil ni a Munguía. Si bien Martínez Gil representa a Morena y Munguía al PVEM, aunque uno le compitió al otro la alcaldía, en el proceso federal, son partidos hermandados. “El verde también es cuarta transformación”, es el estribillo que los une.

Con dejarse ver al lado de Lemus, y de Alfaro, Munguía de ninguna forma avala el triunfo de Lemus ni tampoco lo anticipa un fallo en ese sentido del Tribunal Federal. Al contrario, son tiempos de ponerse a trabajar, de ganar tiempo al tiempo. Y por los anuncios, coordinar y sumar esfuerzos, arroja buenos resultados y los vallartenses son los beneficiarios de esos réditos políticos.

 

Revolcadero

 

Vaya caos el que vivieron cientos, miles de vallartenses, turistas y empleados atorados en las calles del centro de la ciudad bloqueadas por la concentración de familiares, amigos y compañeros de escuela del joven estudiante de la Escuela secundaria 132. Asumen que el muchacho murió a consecuencia de una golpiza que dos de sus compañeros le propinaron al calor de un juego de soccer en el campo del plantel escolar allá por El Mangal. Reclaman justicia y castigo a posibles responsables, entre estos, personal de dicha secundaria pero también negligencia de personal médico de un hospital privado. El personal directivo del plantel sostiene que con oportunidad hicieron valer el seguro medico escolar y el mismo día que el escolapio se quejó de dolores en una pierna. Cuestionan al Hospital Joya, donde un galeno le recetó un paracetamol y desestimó la dolencia del adolescente. Eso fue entre miércoles y jueves de la semana antepasada y ya por la mañana del domingo primero de septiembre el muchacho había expirado. Como el seguro médico es provisto por el gobierno municipal, llevaron su demanda de justicia directamente al alcalde Pepe Martínez Gil.******* Por cierto, hablando del presidente municipal interino, Francisco José Martínez Gil, pues resulta que esta martes 10 de septiembre rendirá su Tercer Informe de gobierno. La convocatoria establece para los invitados una rigurosa etiqueta de color blanco en la vestimenta. El recinto es el patio central del edificio de malecón y el horario a las 20:00 horas, ocho de la noche. En realidad, es el primer informe que le compete rendir a Martínez Gil pues los dos anteriores estuvieron a cargo del “profe de los dieces”, Luis Alberto Michel Rodríguez, que hace seis meses y medio pidió licencia y nomás ya no regresó.

Los artículos de opinión e información son responsabilidad del autor y no reflejan la línea editorial de contralínea.net