Lo que da un respiro a la industria turística al comenzar el verano del coronavirus
Al arranque del verano Puerto Vallarta oferta aproximadamente 25 mil cuartos en 37 hoteles y hasta ahora promedia hasta 2 mil 300 ocupadas, que es lo que registró el fin de semana, después de que durante la misma apenas mil 800 cuartos estaban rentados.
Ramón González Lomelí, director municipal de turismo, informó que aproximadamente llegan al destino un promedio de tres personas por habitación, por lo que se cuenta con alrededor de entre 8 y 9 mil turistas, que es la conducta variable de turistas hospedados en los diferentes hoteles.
“En la zona de Marina Vallarta se registró una ocupación del 22 por ciento, con 235 habitaciones ocupadas; en el centro de la ciudad sólo hay cuatro hoteles abiertos, mismos que tuvieron 258 habitaciones ocupadas, que se suman a las mil 334 habitaciones ocupadas en los hoteles de la zona norte, las 75 de la Zona Romántica y 223 habitaciones en centros de hospedaje de la zona sur”.
Agregó que el promedio de los cuartos ocupados de esos hoteles es de casi 23 por ciento, que sigue siendo bajo y además sólo se trata de los 37 hoteles que están en operación restringida.
“Si bien no son las ocupaciones óptimas, sin duda vino a dar un respiro al destino, sin embargo hay preocupación por las personas que trabajan tanto en hoteles como restaurantes y ganan el salario mínimo, porque para ellos el verdadero sueldo está en las propinas”.
Refirió que a estas personas las propinas les permitían determinada capacidad de gastos y estilo de vida, pero con la pandemia solamente reciben su salario que fue el mínimo, lo que difícilmente les permitió seguir adelante con sus compromisos.
“Ahora que se ha retomado la actividad turística, son estos colaboradores los que comenzarán a regularizar sus percepciones ya que con la llegada de visitantes, aunque pocos, comenzarán a recibir un poco más de dinero por concepto de propinas”.
El funcionario reconoció que hoteles y restaurantes cuentan con todos los protocolos de sanidad instalados, sin embargo existe un problema porque en ocasiones las personas no los respetan e inclusive hasta se molestan cuando se les pide obedecerlos.