CONTEXTOS
Gerardo Sandoval Ortiz
Corría el año 1988 cuando en los Multicinemas Gaviotas de Mazatlán se estrenó, con alfombra roja y a toda gala, El Jinete de la Divina Providencia, “la película de los óscares”. Por esos días era el primer filme biográfico conocido del generoso bandolero santificado por los narcos, deportistas y algunas estrellas de la farándula, Jesús Malverde.
La película fue producto de la adaptación de una obra del dramaturgo Oscar Liera, dirigida por el cineasta mazatleco Oscar Blancarte. Oscar Reynoso se hizo cargo de la ambientación musical. Por eso “la película de los óscares”.
En el boom de las bioseries televisivas, se anunció a principios del año pasado que la cadena televisiva Telemundo se proponía producir la bioserie “Malverde” y entrarle al tema de la narcocultura tan exitosas en televisión y plataformas. Año y medio después, la producción se halla en ciernes y hasta en el elenco ha habido complicaciones.
Cuando Audómar Ahumada Quintero sustituyó a Jorge Medina Viedas en la rectoría de la Universidad Autónoma de Sinaloa, le dio un impulso a la cultura y Oscar Liera aprovechó oportunidades y espacios para explotar su talento. (A principios de los 9, el hoy gobernador electo, Rubén Rocha Moya también fue rector de la UAS).
En esa época (1981) Oscar Liera escribió la obra “Cúcara y Mácara” que no escapa de nuestras memorias. Varias veces acudimos a su montaje en el auditorio del “viejo Seguro” de la avenida Gutiérrez Nájera, a unos pasos de “los monos bichis” del malecón porteño.
En lo personal no somos de ir al cine ni cada semana ni en cada estreno. Pero en aquel 1988 la pegajosa tirilla de “la película de los oscares” y la historia de Jesús Malverde, el llamado “santo de los narcos”, animaba ir a la premier. Además, los organizadores del evento, altos funcionarios de la UAS, ofrecían al final un agasajo a un selecto grupo de amigos.
Todo lo concerniente a Jesús Malverde apasiona a cualquiera y más si el mito del “Robin Hood” mexicano era llevado a la pantalla grande con el ojo crítico de Oscar Liera y de Oscar Blancarte.
“De Culiacán a Colombia que vive Jesús Malverde, este santo del colgado que ha traído buena suerte” reza uno de los estribillos de un escuchado narcocorrido. En efecto, a Malverde se le ha construido sus ermitas en infinidad de ciudades y rancherías perdidas en las sierras.
“Yo nunca te pudo nada, humildemente hoy te pudo solo Juárez y Tijuana, una parte de Guerrero y la sierra de Chihuahua”, canta “El halcón de la Sierra. Hay quienes aseguran que esta leyenda es el contenido de una ofrenda que Joaquín “el chapo” Guzmán Loera depositó en la iglesia de su santo patrón.
El solo nombre de Jesús Malverde apasiona y genera polémicas y no fue la excepción la película Jinete de la Divina Providencia”.
La historia aborda los supuestos milagros de Malverde, el bandolero y salteador de camino azote de los ricos hacendados porfirianos de Sinaloa. Robaba a los ricos para ayudar a los pobres. Los hacendados pidieron al general gobernador Francisco Cañedo quien ordenó ahorcarlo y colgar de un gran árbol su cuerpo. Los historiadores no se ponen de acuerdo si lo atraparon por la traición de un compadre o después de ser herido de gravedad en un enfrentamiento.
La película es una serie de narraciones de los milagros atribuidos a bandolero y entrevistas de curas con pretensiones de santificarlo. Los testimonios de lugareños que veneran a Malverde se desviven por su “santo”, historias que ni ayer no hoy son bien recibidas por la iglesia y sus fieles conservadores. Pese al extraordinario trabajo de Bruno Rey, Germán Robles, Sergio Jiménez, Lina Montes, Carlos East, Abril Campillo, la cinta se condenó a exhibiciones en salas especializadas al cine de arte.
Hoy, transcurridos más de 30 años, el nombre de Jesús Malverde ha trascendido a niveles capaz de competirle a la popularidad de muchos varones de las drogas. El santo patrón Malverde, en el cine o en la televisión, promete captar niveles de atención semejante a la del llamado “el patrón” la bioserie del colombiano Pablo Escobar. Telemundo ya le puso pimienta al diferir el rumor de que Pedro Fernández relevó al actor Fernando Colunga que desistió a protagonizar al papel por haber sido amenazado por grupos criminales.
Los expertos debaten aun hoy en día de si la historia de Malverde no va más allá de un mito surgido de la inventiva de los lugareños de la parte alta de la sierra sinaloense. Pero hay quienes aseguran que Jesús Juárez Mazo nació y vivió en Culiacán. Para dirimir dudas, el Archivo Histórico de Sinaloa, ha exhibido un acta de nacimiento de un Jesús Malverde, nacido el 15 de enero de 1888 en la ranchería Paredones, al norte de la capital.
Ignoramos la profundidad del trabajo con el que se abordará la historia anunciada por la televisora gabacha de habla hispana. Trabajos de esta naturaleza usualmente procuran apartar las historiales reales de las apologías, en este caso a la delincuencia organizada. Les es, sin duda, lucrativo las producciones de las llamadas narcoseries y cualquier trabajo biográfico de Jesús Malverde cae en este campo.
Al citar “la película de los óscares”, por tratarse de un drama escrito para teatro por Oscar Liera adaptado al cine, es una garantía de exponer cine de calidad, de hurgar en la riqueza de los regionalismos y al mismo tiempo hacer crítica al régimen de gobierno, donde se fundían en sus complicidades los militares y la iglesia.
De ese tamaño fue la trascendencia del teatrero Oscar Liera y su película sobre el santo patrono de los narcos, el bandolero y salteador de camino en las postrimerías del porfiriato.
Revolcadero
Generados en la zona de Ixtapa, pero también de sitios tan distantes como Playa Grande, ya son varios reportes y quejas que hemos recibido de un tal Luis Antonio Rivera Delgado. Parece ser que este individuo, recorre la ciudad y donde ve que algún vecino remueve algunas piedras, amplía su banqueta o construye el corralón de su propiedad, se deje ir y abre sus garras. Intimida con la historia de que representar a un sindicato que llama “Justo Sierra” y pues que toda obra deben “reportarse” pagando una respectiva cuota a él. Amenaza con emplazar a huelga pero ofrece un arreglo rápido, sin la formalidad de la firma del contrato y listo. Esta última semana, un vecino en el ingreso a Ixtapa relató que fue por un saco de cemento para remendar su banqueta cuando debió lidiar con el “delegado sindical”. Le insistía en llegar a un acuerdo y dejaba de molestar. El recado que le quieren hacer llegar al señor del sindicato es que deje de molestar a los vecinos de Ixtapa y no se meta en problemas. Que si lo ven zopiloteando corre riesgos de que lo apedreen.******* Las autoridades de salud catalogan de exitoso los cuatro días de vacunación a los cincuentones patasaladas en La Lija. No es cosa menor inocular contra el Covid-19 a poco más de 17 mil vallartenses entre 50 y 59 años de edad. Los contagios del coronavirus se dispararon desde finales de junio hasta situarse a un promedio de dos mil afectados por semana. La situación ya condujo a la crisis por la escasez de oxígeno, además de saturar la capacidad en los hospitales de la región.******* Vaya. Seguidores del presidente municipal con licencia, Arturo Dávalos Peña nos han reiterado le hagamos llegar el mensaje de que saque la cabeza y ya supere la derrota electoral y retoma el liderazgo político del Movimiento Ciudadano. Y nos dicen que el mismo mensaje también es válido para Guadalupe Guerrero Carvajal, de quien esperan al menos una llamadita de consuelo mutuo. Les llama la atención que Dávalos y Lupita Guerrero rehúyan al saludo.