CONTEXTOS
Hubieron de transcurrir casi dos meses de aquella tronante declaración del gobernador Enrique Alfaro contra Dante Delgado Rannauro, acusándolo de llevar al aislacionismo al partido, centralizar las decisiones y cerrar cualquier posibilidad de unirse al Frente Amplio por México, para que ambos personajes fumaran la pipa de la paz y guardaran las hachas de guerra.
El martes, desde el Senado de la República se transmitieron en vivo escenas que en horas se hicieron virales en las redes sociales. Era Alfaro Ramírez y el dirigente y dueño del MC, Dante Delgado en la que uno al otro se alzaban la mano señal entendida que habían conciliado posiciones y se alistarían para ir juntos a nuevas batallas electorales.
Para quienes se inician en estas lides, en cada decisión de los hombres de la política a la mexicana siempre hallarán nuevas enseñanzas. Cualquiera que observó aquel video del martes 22 de agosto, que con la ira reflejada en su rostro hacía gala de una firme y retadora retórica, pudo haber concluido que Alfaro rompía absolutamente con el MC, el partido que lo convirtió en gobernador de Jalisco y presidente municipal de Guadalajara. (A la alcaldía de Tlajomulco de Zúñiga llegó postulado por el Partido de la Revolución Democrática).
En su calentura coyuntural, Alfaro lastimó su credibilidad al abrazarse muy sonriente y complacido con aquel hombre al que acusó de someter a su voluntad a la militancia del MC, particularmente a los emecistas de Jalisco. Lo acusó de tomar decisiones unilaterales; de cometer infinidad de errores en la conducción del partido; de falta de claridad al definir reglas para la definición de la candidatura presidencial y poner oídos sordos al planteamiento de discutir apoyar a Xóchitl Gálvez.
Ante tantos errores graves, “yo ya no quiero participar. Me parece que en la dirigencia nacional no hay claridad de lo que se está haciendo y se están cometiendo errores muy graves. Que cada quien asuma su responsabilidad, yo no seré parte de esas decisiones”, diría en agosto en un video publicado en redes.
En subsiguientes entrevistas ratificaría su enfado contra Dente Delgado: “Cuando yo participe en Movimiento Ciudadano, los llevé a ganar elecciones muy importantes, encabecé un proyecto exitoso, convertimos este proyecto en uno de mucho mayor alcance nacional, estoy muy orgulloso de lo que hice y con lo que generé para MC. Yo ya no tengo interés en participar en un proyecto que no entiendo, en donde todo se decide de manera unilateral y que simple y sencillamente nos quieren someter a todos a la voluntad de quienes dirigen el partido a nivel nacional”.
En un video que circulan por las redes sociales, se le escucha decir a Alfaro: “No voy a pelear ni disputar nada, que ellos tomen sus decisiones y que tengan suerte… Respeto mucho a Dante, pero las decisiones que está tomando no van a tener mi acompañamiento. Yo no voy a ser parte de lo que viene para Movimiento Ciudadano (…) Yo decidí retirarme de la actividad política, electoral y estoy concentrado en mi trabajo como gobernador, yo no voy a meterme en esos temas”, reafirmaría Alfaro.
Daba la impresión de colocar el último ataúd y ponerle un final accidentado a su participación en el MC.
La posición de Alfaro se consideró como el anuncio de su prematura jubilación política y se encendieron los focos rojos entre sus seguidores. Por esas fechas, Alfaro se reunió en privado con la aspirante presidencial del FAM lo cual hizo tomar fuerzas la versión equivocada de que el gober se alistaba para pronunciarse en favor de Xóchitl Gálvez.
Sin embargo, los aspirantes a sucederlo en la gubernatura no cesaron sus hostilidades y se multiplicaron los destapes. La sola amenaza de emigrar todo el grupo a otra plataforma partidista no desanimó a nadie. En octubre llegaron uno por uno los informes de gobierno y brotaron más y más destapes de las figuras del MC. En el informe del alcalde tapatío, Pablo Lemus Navarro, Alfaro y la crema naranja sorprendieron pronunciándose por el gobernador de Nuevo León, Samuel García. Pasadas algunas, este pareció haberles tomado la palabra.
Desde aquellos días, hubo quienes observaron haber una falsa rebelión inventada por Alfaro para ganar tiempo pero sobre todo para reforzar su débil posición y no ser avasallado en las negociaciones que se venían en puerta para decidirlas candidaturas en la entidad. Lemus ya estaba muy por encima de las piezas de Alfaro y tenía el apoyo de la dirigencia nacional. Podía ceder la candidatura a gobernador, pero se proponía imponer a su gente en las alcaldías más importantes, sobre todo en la zona metropolitana de Guadalajara.
En Puerto Vallarta y desde finales de agosto fue notorio el activismo de Ramón Guerrero Martínez, “el mochilas”, entregando útiles escolares en las escuelas del municipio. Lo señalaron de hacer “campaña” con recursos públicos, pero nada lo detuvo. Sus seguidores nos dicen que tiene luz verde de Alfaro y que será el próximo candidato a la presidencia municipal. Que trae dinero en la cartera y que la evidencia está en los apoyos que fue a ofrecer a las familias damnificadas por la tromba del miércoles de la semana pasada. Nos afirman que “el mochilas”, lleva mano y mete en los censos que se levantan para posteriormente traer los apoyos.
Ignoramos de dónde le vienen los recursos a Ramón Guerrero, pero podemos aplaudirle que venga y derrame dinero en la ciudad. Y conste no hacemos con ironía, por aquel supuesto del que “regrese… pero lo que se robó”. Lo que es público es su afán por elevar su rating y hacerlo a costa de programas de gobierno para dar a conoces mote de “el mochilas”. Ya ven, en el medallón trasero de algunas unidades del transporte urbano “invirtió” en la frase “mochilas para todos” y eso es derrama de dinero. Eso no es cortesía del pulpo camionero.
Revolcadero
Por cierto, ya se lee las crónicas de la visita de Ramón Guerrero allá por la colonia San Esteban y las orillas más bajas del Pitillal donde las bravas corrientes amenazaron con llevarse viviendas. Que son muchas las casas afectadas desde sus cimientos por el deslave y con ellos se apersonó “el mochilas” a llevarles por ahora promesas de darles solución y como para convencerlos que va en serio, pues se llevó maquinaria para de menos reforzar los pisos aflojados por el temporal de lluvias. Que con eso al menos se evitará se amplíe el socavón que amenaza con tragarse las viviendas. Desde luego, el político de Ayutla se presentó en su calidad de Subsecretario de Gestión Integral de Recursos y Programas Sociales. Aunque en los hechos, según nos relató un vecino, Ramón Guerrero más bien se parecía a cualquier político en visita de campaña electoral, seguido por un grupo de seguidores bien uniformados. No sabemos si eran funcionarios de gobierno con el uniforme pero si vecino cree haber visto un acto de campaña, nosotros le creemos.******* Ahora que mencionamos a Pablo Lemus, pues que el Guadalajara anuncio este miércoles que antes de concluir octubre pedirá licencia a la alcaldía para buscar la candidatura del Movimiento Ciudadano a la gubernatura. Que solo está por definir un “acuerdo interno” en los siguientes días. No dijo si de ese acuerdo saldrá el alcalde interino pero seguro eso es. Recordemos que en dos semanas se abren los registros de aspirantes y el domingo 5 de noviembre arrancan las precampañas para gobernador. Lemus dijo tener previsto que se registrará el lunes 30, penúltimo día de octubre.****** Interesante la declaración del comisionado político nacional del Partido del Trabajo, José Luis Sánchez González. Dice que el PT, si se coaliga con Morena en la competencia por la alcaldía de Puerto Vallarta y buscará el 20 por ciento de las posiciones de la planilla. Cálculos más cálculos menos, eso es igual a dos candidatos a regidor. Quién sabe si por granjearse simpatías con los michelboys se portó generoso al considerar que la exclusión de Flor Michel de la lista de aspirantes a la candidatura a gobernador por Morena fue una decisión arbitraria. El dirigente estatal del PT, quien vino el lunes a Ixtapa y se reunió con líderes, fue también cepillado de la lista de aspirantes a ser coordinador de la defensa de la 4T en Jalisco.
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