CONTEXTOS
Gerardo Sandoval Ortiz
“Si el profe Michel pudo ser, yo también puedo”, hiló su pensamiento Faustino de la O antes de abandonar al PRI, el partido político de su vida, yéndose a probar fortuna en Morena. La elección para congresistas nacionales fue su presentación y probó el agrio sabor de otro fracaso.
El maestro jubilado Faustino de la O Michel, junto a Juan Carlos Rodríguez, “el meño dances”, son las últimas dos contrataciones de Morena previo a la jornada del domingo pasado. El profe Faustino se apresuró a medir sus niveles de popularidad, se registró como aspirantes a congresista, y por resultado obtuvo calificaciones reprobatorias.
No vamos a decirles la edad del profe Faustino, pero deberá ser de la camada y rodada del profesor Luis Alberto Michel Rodríguez. Del alcalde, fue su director en la legendaria Escuela Secundaria Técnica número 3, la ETI 3.
Entre los viejos mentores del magisterio es sabido del gran sueño del profe Faustino en ser presidente municipal. Perdió media vida intentando abanderar al Partido Revolucionario Institucional pero jamás pudo. En más de una vez se apuntó a participar en una elección interna pero no pudo salvar ese escollo. Siempre presumió tener todo el apodo del jerarca de la CTM Rafael Yerena Zambrano, lo cual era cierto, pero nunca le alcanzó para ser candidato a alcalde.
En su haber, tiene una experiencia. En el primer lustro de la década de los 90, se inscribió en una elección para elegir delegado municipal de El Pitillal pero fue derrotado por don Ricardo Villaseñor. Nos guardamos datos precisos pero de entre cinco aspirantes, sus votos apenas le alcanzaron para aparecer en la cuarta posición de la tabla.
Cuando fue director de la ETI 3, se sintió que estaba en posición de proyectarse en la política local. Durante los años dorados del panismo, esperó paciente la oportunidad y se ganó un espacio en la planilla del PRI, encabezada por Gustavo González Villaseñor. Así cumplió parcialmente su sueño y de 2003 al 2005 fue regidor.
Con honestidad, poco o nada podemos destacar de sus aportaciones al municipio. Bueno, nos acordamos de piruetas para eludir las exigencias de renunciar a uno de sus dos sueldos, el de su plaza en la Secretaría de Educación como director de una secundaria federal o al de regidor. Mas o menos estaba en el supuesto de la regidora María Elena Curiel Preciado.
Los cuestionamientos a Faustino de la O iban más allá de ser un servidor público con doble cheque. La crítica tampoco respondía a emplazarlo a pedir licencia a la regiduría ni a renunciar a su plaza docente. Lo inmoral fue en sentido de su imposibilidad de cumplir con su doble trabajo. Cobro durante tres años en los dos lados y en ninguno trabajó. En la presidencia se excusaba de su ausencia diciendo que por atender la Eti. Y en la Eti avisaba que atendía la presidencia.
Naturalmente, los morenos de hoy, los ciudadanos milenial, no lo conocen. Tal ves allá por el barrio donde el finado Don Manuel López Coronado, “el demonio blanco”, lo tengan por buen vecino. Por esos rumbos tiene su escuela privada el Colegio “Alfred Nobel”. Sabemos que le va bien en la vida. También sabemos de su gusto por la poesía. Es un extraordinario declamador, un hombre de las letras y la literatura.
Ignoramos si renunció a medio siglo de priista por aceptar la invitación de algún encumbrado moreno. Descartamos que por conducto del profe Luis Michel. Con 64 votos, los morenos le recetaron una dolorosa derrota y le cortaron su primera aspiración en ese partido, la de ser consejero nacional y distrital.
Juan Carlos Rodríguez Robles, “el meño dances”, anunció su incorporación a Morena en plena efervescencia por la disputa de las diez plazas para consejero distrital y congresista nacional. “Ya salió el peine”, nos dijo un amigo y vecino del “Meño Candoras” como también se le conoce a Rodríguez Robles.
Si el profe Faustino de la O se reviste por cumplir su sueño, el virus de la “aspiracionitis” también atrapó al muchacho de El Pitillal. Chuyito le ha jurado que él si le cumplirá su sueño de ser delegado municipal y si se puede, pronto lo será. La promesa jurada de Chuyito fue que para el próximo año le daba una patada en el trasero a Sergio Rodríguez “el “rayo” y lo sentaba a él en la delegación.
Los amigos, dicen del Meño que ocupaba de chamba y andaba en eso. Que Susana Rodríguez Mejía, la administradora de la UNIRSE y representante del gobernador Enrique Alfaro no le cumplió. Por ahora se da por satisfecho una chambita en el área de cultura.
Por otro lado, se dejó correr el rumor de que “el meño dances” esa parte del staff de la regidora Guadalupe Guerrero Carvajal quien le había conseguido una plaza. Varias versiones nos aseguran que la versiones cierto.
Del nuevo moreno, algo claro nos dicen los de su entorno: “Es pura llamarada de petate. No mueve tanta gente como dicen. Al menos en la población LGBT no lo quieren”, nos escribió un miembro de esa comunidad.
Por último, que un viejo activo que por más de medio siglo sirvió al PRI se erija como la cara del futuro de Morena y que un matraquero del Movimiento Ciudadano, llegue a desplazar a fundadores de Morena y cuadros de la izquierda local, confirma que la 4t patasalada no va mas allá de un grupúsculo con propósitos personales.