CONTEXTOS
Gerardo Sandoval Ortiz
No a pocos observadores del acontencer público diario llamó la atención observar al abogado Francisco Vallejo Corona codo a codo con Salvador Llamas Urbina, cuando la noche del pasado del lunes 31 de enero y madrugada del martes 1 de febrero se encontraron con representantes sindicales para apagar la amenaza de huelga en el Seapal.
La presencia del abogado Vallejo Corona en esa vez en atención a una petición para brindar “asesoría especial” a la administración municipal y del organismo operador del agua potable. Fue una “intervención extraordinaria”, nos dijo al responder a una solicitud nuestra sobre el tema.
Ahora, Vallejo Corona no es el único elemento ligado a las últimas tres administraciones emanadas del Movimiento Ciudadano que se sitúa en esa situación. Varios miembros del grupo político que controló la administración municipal pusieron distancia del MC, y de Arturo Dávalos y su “grupo Vallarta” después de perder las elecciones del año pasado.
Hace una semana ocurrió el diálogo entre dos usuarios de Facebook. Uno le escribía al otro advirtiéndole que el MC estaba perdiendo respaldo de gente “que se la partió y se la parte en campañas”. “Es gente con carisma, liderazgo, con responsabilidad, gente dinámica…”, le insistía antes de dar nombres de quienes “tronaron como huevos duros”. De ese diálogo tomamos los nombres de David de la Rosa Flores y de “el cachis”, Víctor Manuel Aréchiga. Los dos fueron delegados municipales de Ixtapa en y un tiempo.
Hacer ya varios meses que nos enteramos que David de la Rosa había decidido poner distancia del MC y particularmente del grupo político de Arturo Dávalos Peña. Recientemente supimos que a éste último le explicó cara cara sus razones luego de coincidir en un restaurante. Un testigo del momento nos relató haber sido Dávalos quien llamó al ex delegado ixtapense y ex regidor para preguntarle porque no le respondía llamadas y las causas de haberse negado apoyar en la votación por el pacto fiscal, ejercicio celebrado en diciembre.
El distanciamiento de David de la Rosa con el MC se explica en el sentimiento personal de haber sido ninguneado por el ahora Diego Franco Jiménez. Cuando éste fungió como director de Desarrollo Social y el subdirector fue De La Rosa, Franco se esforzaba en obstruir su trabajo. Santiago Centeno conciliaba las posiciones.
Diego Franco había coordinado las campañas de Dávalos, las mismas funciones que se le encargaron en la campaña de Guadalupe Guerrero Carvajal. Con el visto bueno de Dávalos, también de Guadalupe Guerrero, la candidata a la alcaldía, ratificaron la decisión de confinarlo a la zona rural en la última campaña. Si bien, no pudo ganar en la suma global de votos de las casillas de su sector, se las arregló para desplazar a Morena hasta la tercera posición en las casillas de El Colorado hasta Las Palmas. Allá, Luis Munguía superó con 112 votos a Lupita Guerrero, quien superó a Luis Michel con 183 votos.
Los amigos de David de la Rosa, también él, consideran que en Ixtapa lo bloquearon intencionalmente al ser desplazado por un grupo de naranjas apoyados por Diego Franco. El dos veces regidor, que concluyó la gestión como secretario general del Ayuntamiento, Eduardo Martínez Martínez fue el coordinador de la campaña. Morena aplastó con una diferencia de por lo menos 5 mil votos al MC. Al final, Lalo Martínez acabó por cargar desgastes con algunas piezas del engranaje naranja.
A finales de agosto, Puerto Vallarta sufrió cuantiosas afectaciones debido a los efectos del huracán “Nora”. Uno de los afectados fue David de la Rosa. En el ranchito posee un rancho a orillas del río Mascota el cual habilita como salón de fiestas. Los embates de las creciente causaron daños a su propiedad y cuando esperaba algún apoyo del gobierno del estado, sintió aires de desprecio. Fue cuando decidió distanciarse del MC, de Dávalos, de todo lo que oliera a “naranjas”. Tampoco respondió llamadas telefónicas.
Lo de Paco Vallejo tampoco sucedió de un día a otro. Desde su época en el Partido Acción Nacional, el abogado no ocultaba sus aspiraciones políticas y por lo menos una vez se inscribió para participar en una elección interna. Sin renunciar a esa aspiración, como Dávalos, los Salcedo, Lupita Guerrero, Nacho Guzmán, muchos otros, brincó del PAN al MC. Consideró siempre que no le daban “jugada” y por eso las relaciones se fueron enfriando con el paso del tiempo. Ya en el poder, también resintió el trato frío de la elite local gobernante. En la cronología no escrita, bien podemos sostener que la distancia se impuso del lado del “grupo Vallarta”. En la campaña pasada, estos desconfiaban del abogado, una de las razones por la que se le cerró la posibilidad de ocupar un espacio en la planilla.
Ya en la recta final de la campaña, algunos miembros del grupo de Dávalos sostenían que el abogado Vallejo mantenía acuerdos con Morena. Nunca nadie pudo mostrar evidencias. En esta semana, nos han dicho que la evidencia es la participación de Vallejo en las negociaciones del Seapal con el sindicato.
Vallejo Corona no se va del MC porque nunca fue militante de este partido y al no haber afiliación, no se le puede acusar de haber traicionado a dicho partido. Tampoco se puede negar su compromiso con la ciudad, a través del gobierno anterior. Ayudó a Arturo Dávalos para recuperar el servicio de limpieza de la ciudad concesionado a Proactiva y Envir Eau. Fue la pieza crucial en el largo y tedioso trámite jurídico para obtener la “municipalización” del Seapal. Por ese conocimiento fue llamado por el alcalde Luis Michel para la “asesoría especial” la semana pasada.
En los dos casos citados arriba, recogimos opiniones respecto a que el MC se ha estado desgranando por la soberbia y egoísmo con el que se conducen algunas de sus figuras. En la elite de ese grupo no hay reflexión ni autocrítica. Esa arrogancia les impidió ver la necesidad de sumar apoyos o no cerrar espacios en la campaña pues nunca consideraron la posibilidad de perder los comicios.
Revolcadero
En el último semestre del año pasado se iniciaron los trabajos de la que es considerado la mayor inversión en la historia de Ixtapa. En pocas semanas la obra tomó forma. Los constructores se acercaron a los vecinos para informar del proyecto; sería una Tienda Ley, la segunda en Puerto Vallarta de esa cadena de supermercados nacida en Culiacán. Pero en octubre llegó el cambio de gobierno y los morenos tomaron la administración municipal. Un día se apersonaron varios inspectores de Planeación Urbana, procuraron a los responsables de la obra, revisaron documentación, dialogaron, levantaron y firmaron oficios y antes de irse colocaron sellos de clausura. Todos los trabajadores fueron reasignados a la construcción de la tienda Ley, sucursal Nuevo Vallarta, en Bahía de Banderas. Después de unos dos meses, la antepasada semana se retiraron los sellos y este martes primero de febrero se reanudaron los trabajos. Para obtener los permisos correspondientes, fue una larga negociación, y en algún momento, la familia Ley hasta pensó en cancelar la millonaria inversión. Eso que ya habían iniciado la contratación de cientos de empleados.****** Este domingo se registró en Tijuana el asesinato del hijo de un periodista y algunos medios de comunicación lo tomaron como una agresión al gremio. En este caso hay un detenido y presunto responsable del crimen, según reportaron las autoridades locales de aquella entidad. La Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos contra la Vida recaba evidencias para integrar la carpeta de investigación. En Tijuana se cometieron los asesinatos de dos periodistas, Margarito Martínez y Lourdes Maldonado, en las últimas dos semanas.****** Este fin de semana, en una breve estancia en dos casas, ambas a corta distancia del río Pitillal, padecimos lo que todos los días sufren en un amplio sector de la ciudad: la escasez, a veces ausencia total de agua. Si en la planta baja no hay agua por largos periodos, quienes habitan en una segunda planta, la escasez del vital líquido es doble. Los amigos nos platican que con cierta regularidad falla el abasto de agua entubada pero que el problema se agudizó en los últimos meses. Creen que en efecto, todo es por incapacidad de los actuales responsables del Seapal. Uno de los perjudicados dijo que la falla está en haber despedido a técnicos que conocían y sabían a pie juntillas dónde se hallaban las debilidades y los problemas del organismo. En fin. Es cierto que el desabasto del agua afecta a miles de hogares y que si los nuevos gobernantes no solucionan la crisis, ahí sellarán su destino político.