CONTEXTOS
Gerardo Sandoval Ortiz
Antes de las nueve de la mañana, el jueves 20 de mayo, Enrique Aubry se apostó en la puerta de la casa de Edelmira Orizaga con tanta opulencia que los despachadores de la carnicería Sierra desatendieron a sus clientes. “Llegó bien dopado en la mañana a ofrecerle un puesto mediocre de coordinadora del distrito y una dirección…”, nos confió un allegado de Edelmira Orizaga Rodríguez.
Es el mismo personaje que el miércoles de la semana agredió a su asistente, Braulio Álvarez López, quien añadió haber recibido amenazas de muerte por la terrible falta de no cumplir sus órdenes de atender a sus invitados en un departamento de colonia Moderna allá en Guadalajara.
Es el mismo Enrique Aubry de Castro Palomino, dueño de la franquicia política denominada Partido Verde Ecologista de México que ha protagonizado por lo menos una decena de escándalos, casi siempre encumbrados políticos o funcionarios públicos aunque también ha infamado a servidores de baja jerarquía.
Edelmira Orizaga, ese jueves, fue avisada por su repentino visitante de haber sido borrada de la planilla del Partido Verde Ecologista, la de Luis Ernesto Munguía González, para abrirle espacio a la petista Corina Naranjo Trujillo en la cuarta posición. El PVEM obtuvo la tercera posición y se agenció tres regidurías plurinominales; Corina Naranjo quedó fuera.
Lo que nos llamó la atención, no fue que a Edelmira Orizaga le ofreciera Aubry una dirección (solo de ganar el PVEM la alcaldía) sino el supuesto estado que arribó el dirigente estatal y tocó la puerta de la casona de la colonia Morelos y Pavín, casi esquina con Etziquio Corona. Con sobrado desparpajo le entregó la representación distrital del partido y, con las riendas del partido, mucho apoyo en el futuro. Así como a Munguía, ya derrotado, la ofrece la dirigente estatal del partido.
Edelmira Orizaga había llegado al PVEM al cabo de una trayectoria política. La despampanante mujer, que a finales de la década de los 70 vendió seguros y libros en Tepic y que suma 4 décadas haciendo actividades de “gestoría social” según su currículum, fue presidente de la junta vecinal de su colonia, presidente de seccional del PRI, miembro del Comité Directivo Municipal y de su Consejo Político, también, del Movimiento Territorial y de las mujeres cetemistas, recién se había sentido defraudada del gobernador Enrique Alfaro. Del Movimiento Ciudadano fue candidata a diputada federal en 2012 pero al concluir en2018 su regiduría se sintió poco valorada y buscó probar suerte en Morena.
Cuando Munguía, como Edelmira, fueron relegados en la competencia por la alcaldía, brincaron al PVEM. En Guadalajara acordaron abrirle cupo en la cuarta posición de la planilla a munícipe y cuatro direcciones. El equipo de Edelmira nos afirma que Aubry firmó el documento compromiso. Por eso les extrañó su agresiva conducta con la que llegó al domicilio de la calle Asunción Villaseñor.
Aubry es un tipo acelerado, irascible, extremadamente agresivo. No se puede obtener otra conclusión de su personalidad con la suma de sus escándalos.
Aubry de Castro Palomino es la cara más visible de un grupito de una familia de amigos que “administran” al “verde” en la entidad en donde lo mismo construyen alianzas coyunturales y electoreras, con el PRI, PAN, MC o Morena. A fin y al cabo ese es el distintivo de la familia de Jorge González Torres su fundador.
En junio de 2017, el último año de la LXIL Legislatura, Aubry sorprendió a separarse de la diputación que había presidido. Fue consecuencia de una serie de escándalos en los que se vio inmiscuido. Con el apoyo de la influyente fracción priista fue presidente del Congreso pero al unirse a la posición de los diputados del MC, entre los que estaba Ramón Guerrero, se ganó el reclamo de los priistas. Aubry y “el mochilas” apoyaron la iniciativa de regular las plataformas de taxis ejecutivas y abrir las puertas a los taxis, Uber, City Drive, etc.
En el historial negro del nuevo amigo de Luis Munguía está el incidente de 2010 en las afueras del estadio Jalisco cuando con su automotor arrolló a un diputado panista. Las versiones decía n que se confrontó con el ex diputado José Antonio de la Torre y el golpeado en reversa fue Iván Argüelles.
Un año después, en pleno debate, retó a golpes a otro diputado local panista, Héctor Álvarez, reclamándole por haber denunciado aviadores en la nómina del Congreso. Por lo menos un miembro de la jerarquía del PVEM ha sido señalado de “aviador”. Al propio Luis Munguía, su último candidato a alcalde, que aspira a la dirigencia estatal, fue acusado de tener en la nómina del Congreso a su “novia”.
En mayo de 2015, Aubry agredió a brigadistas de campaña de un candidato panista. Hubo dos lesionados de gravedad pero, como en todos los casos previos y posteriores, (salvo una excepción) el niño verde charro, se salió con la suya y nunca fue procesado.
Cuando se discutía sobre la conocida como “ley Uber”, Aubry también discutió y supuestamente se lio agolpes con un funcionario del Instituto de Movilidad. Lo que trascendió es que el debate subió de tono y el amigo de Munguía perdió sus controles y se tornó violento. Sin embargo, en privado, nuestros diputados se pusieron de acuerdo y todo quedó en nada.
En mayo del 2016 se registró el incidente con un civil en calle. Aubry iba con sus guachomas en su camioneta y en el incidente, los escoltas supuestamente amenazaron con arma de fuego. En septiembre de 2016, Aubry llevó su agresividad al coordinador de la fracción priista, Hugo Contreras y en los pasillos del Congreso por poco acaban en golpes.
Para el proceso electoral de 2018, los priistas decidieron poner distancia del dirigente estatal del PVEM, por su proclividad a la violencia. Hábil para acomodarse, “los verdes” se aliaron a Morena y prolongan su luna de miel con los morenos. Para la última elección federal, la intermedia, concretaron su coalición electoral pero en los comicios locales compitieron separados. Al cerrarle Morena las puertas Munguía, Aubry la ofreció la candidatura y han renovado el compromiso de ir más allá.
Será una explosiva alianza la unión del “niño verde charro” y “los munguiboys”. Arderá troya si un día Aubry y Juan Carlos Castro no se ponen de acuerdo y más si el último, osa en cerrarle el camino a algún recomendado. Este puede ser Abel Chávez Galván o su yerno Bernardo Macklis Petrini. Recordemos que la hija de Abel Chávez, quien fue vocero de Gustavo González Villaseñor (2004-2006), Daniela Elizabeth Chávez Estrada, se matrimonió con Macklis que para mayores señas es primo de Aubry. Por ese “mérito” Abel fue candidato a regidor por el PRI-PVEM y su hija, regidora en Tlaquepaque.
Revolcadero
A tres meses de que Luis Alberto Michel Rodríguez tome proteste como nuevo presidente municipal, en las delegaciones municipales, y los amigos ya se nos han acercado para hablar del tema de la delegación municipal para 2021-2024. Y no, no empiecen con que es politiquería porque eso no aplica cuando se trata de los morenos. “Nosotros no somos como los de antes peor ya buscamos la delegación”, nos dijo un activista moreno. Otra persona amiga definitivamente nos dijo que se la ofrecieron en Ixtapa pero le prohibieron platicarlo. En Las Palmas, se mueve Alfonso Zamora de Santiago, mejor conocido como “el tejuinero”. Sin embargo, el contador Jorge Armando Bautista Macedo también quiere y corre a su favor un mejor perfil. Jorge es ejidatario y ya compitió por la presidencia del ejido. No sabemos si es cierto que en El Pitillal, el Chon Topete, ha patico a sus íntimos que le gustaría volver los viejos años de cuando ya fue delegado y pues ahora dice que, “si me la jugué con Morena yo puedo”. Y en Las Juntas, Efrén Izas Venegas anda en las mismas que Chón “el monaguillo” del cura Agustín Parra. Efrén Izas ya fue presidente del ejido y delegad municipal cuando el pastor David Cuevas García fue presidente municipal por los colores del PAN (1997-2000). Los amigos de Las juntas han visto ganas en Lupita Segura, una dama que por un tiempo fue del grupo de Ariadna “La Nena” Luquín, matraquera de Luis Munguía, pero presume méritos de campaña morena.******* De Ixtapa, sabemos que la regidora electora Sara Mosqueda trae su pollito y que el propio profe Michel le ha pedido le de luz verde y mano y ser ella quien imponga al delegado que sustituye a Felipe Fernández, “MaCoy” para los amigos. Lo que nos dicen, y que no sabe Sarita, que otro regidor electo, el motejado como “el chato”, distinguido vecino de allá por las faldas de Los Ramblases, tiene mucho interés en meter su mano en Ixtapa. Pero bueno, como no pudimos obtener la autorización para abundar en el tema, respecto a Ixtapa, ahí la dejamos. A los amigos de Morena, tal vez por ser pocos, en este espacio se les apoya y protege.******* Vimos este fin de semana el cuadro de las estadísticas de contagios del Covid-19 en nuestro tropical edén y si, los focos de las alarmes ya se encendieron. Los contagios se dispararon y a este paso en unas o dos semanas estaremos en el semáforo rojo y sin tocar baranda. Con razón el miércoles de la semana pasada el alcalde interino, Jorge Antonio Quintero Alvarado hizo un llamado público a extremar medidas preventivas y sanitarias. Ordenó también redoblar la vigilancia en establecimientos de todos los giros, por lo menos invitar al uso de cubrebocas y atender otras medidas. No solo es Puerto Vallarta. La Mesa de Salud en el estado también implementó medidas sanitarias que tienen el mismo objetivo en todos los municipios de la entidad. En resumen, seguimos en pandemia y, para quien lo olvidó, regresemos al uso del cubrebocas, el gel antibacterial y mantener la sana distancia. Eso es lo mínimo. Si no tiene nada que hacer en la calle, guárdese en casa. Dicen, dicen, que el virus Delta es agresivo y más contagioso. Cuidémonos.