CONTEXTOS
Gerardo Sandoval Ortiz
En un audio difundido masivamente este turbulento fin de semana, en la voz de Mónico Cervantes, revela un nombre clave que nos permite dimensionar la capacidad de engaño de los operadores de Luis Munguía para persuadir a los morenos lo acepten como su abanderado. Y en otro audio, la química Laurel Carrillo es capaz de sonrojar al regidor Rodrigo García Caballero cuando escucha el ruego de cooperar con una quincena para gastos de campaña.
Son dos audios obtenidos de manufactura morena que circulan profusamente en público y en privado al calor de una accidentada campaña interna que pone en duda el triunfo electoral de Morena que muchos creen era una victoria cantada. Es el más intenso fuego amigo jamás visto en el municipio en una campaña interna.
En una pasajera reflexión del fin de semana, valoramos la posibilidad de eludir el tema del proceso interno de Morena por considerar haber ya caído en un abuso y correr el riesgo de saturar a nuestros exigentes lectores. Son los amigos morenos quienes proveen el material y nos alientan a no eludir el tema.
Los “duros” de Morena escucharon, primero con cierta incredulidad y luego con cierta rabia el diálogo de Mónico Cervantes Ruiz con Francisco “pancho” Lomelí Corona. Hablan en calidad de aspirantes a la candidatura a la alcaldía empero Mónico, ya revestido de “operador político” por obra y gracia del senado, José Narro Céspedes
“Es un hecho que va Munguía, he? Te va a llamar Jesús Martínez”, le dice Cervantes a Pancho Lomelí, quien a su vez le cuestiona: “¿Y ese quién es?”.
-“Es la gente de avanzada del Senador (Narro)
Pancho Lomelí, le pide precisar el nombre de ese senador (“Magallanes también es senador…”) y así obtiene el dato completo de Cervantes Ruiz.
La malicia de Lomelí Corona le costó sospechas de ser el filtrador del audio. No faltó quien lo señalara de “traidor”. Sin embargo, los juicios sumarios cayeron más en Mónico Cervantes quien con su silencio aceptó las sospechas como ciertas, de ser el “traidor” y trabajar en favor de la intentona de imponer a Luis Munguía como “candidato de unidad” de Morena a la alcaldía.
Cuando escuchamos el nombre de Jesús Martínez, a quien falsamente presentó Mónico como “operador del senador Narro”, nos acordamos de un amigo personal y promotor del diputad local con licencia, Luis Ernesto Munguía González. Mónico tiene muchos años, casi tres décadas en la política pero eso no le alcanza para identificar a quienes estafan con falsas charolas. Es fácil hallar evidencias y pruebas de las relaciones personales de Munguía con el tal Jesús Martínez, el supuesto operador de la avanzada y equipo de trabajo del senador Narro.
Sin rubor alguno, Mónico Cervantes le suelta a bocajarro la propuesta a Pancho Lomelí, porque Narro “me tomó confianza para esos temas. La propuesta del amigo de Munguía –le adelantó Mónico- es una regiduría con la condición de apoyar a Munguía y también desistir de la denuncia “y vamos a darle pa delante al tema”.
El audio causó furor en las redes sociales todo el fin de semana. Coincidió con la últimas rondas de pláticas que en privado y en público sostiene todo el equipo del senador Narro con la casi treintena de aspirantes a la candidatura a la alcaldía y otros tantos a las regidurías, diputaciones locales y federales.
Luis Munguía está rodeado de operadores de dudosos escrúpulos formados en el viejo PRI formados en las cloacas del oscurantismo políticos electoral. Asi se chamaquearon a Mónico Cervantes que con singular alegría le ofrece a Lomelí ser regidor en la planilla de Munguía. Lo del team Munguía, pudiéramos calificarlo hasta de un abuso de ignorancia, de Mónico y de los morenos que ni siquiera saben identifican quién es realmente del equipo de Narro y quien o quienes son los amigos operadores de Munguía
La farsa de Munguía y sus operadores no prosperó y fracasaron en cumplir el único requisito de Narro, de construir la candidatura de unidad a través de obtener las firmas de desistimiento y él llevar al CEN de Morena la propuesta. Ello derivó en el anuncio dominguero de irse a las encuestas como el método de la encuesta a la que habrán de someterse cuatro o cinco aspirantes y de este proceso, surja el candidato.
Los opositores Munguía, todos los aspirantes “internos” y otros “externos”, confían que el legislador local del MC, por cuyo partido se registró y ha sido debidamente aprobado su precandidatura para competir por la diputación federal, no pase el filtro que representa la valoración y aprobación de la Comisión Nacional de Elecciones. Si aparece en la terna de cuatro o cinco para la encuesta, y si después de esta, el partido impone a Munguía, está decidido que habrá impugnaciones para echar atrás la candidatura.
Es en este escenario que aparece un extenso audio. En nuestras primeras escuchas identificamos el acento característico de la voz de Laurel Carrillo Ventura. Habla con don Rodrigo García Caballero, quien apenas el último viernes de febrero protestó como regidor.
Ignoramos el lugar de la charla que todo indica se realizó antes del viernes 25 de febrero, cuando ocurrió el relevo de regidores. De fondo se escucha el ladrido de perro. (…) “también es importante que hablemos es el tema económico. Este tema es… yo estoy pagando una campaña… entonces me gustaría que me apoyaras con la quincena, para seguir pagando lo que estamos haciendo, con la gente, que me están prestando…”.
¿Cómo que le están prestando?, interrumpe el regidor.
No bueno, es que estamos trabajando en la campaña para la diputación. Porque también queremos negociar con los que lleguen para tener un puesto con la gente que está trabajando.
Dicho lo anterior, se escucha una pesada exclamación de don Rodrigo García:
-Hay dios. Esto si está bien cabrón como para que… ¿crees que algún interno llegue? Interroga a la química, que retoma el diálogo: “Mira, Pero si no es con el que llegue, si yo soy la candidata a la diputación con el que llegue, yo tengo que hacer una negociación porque traemos el trabajo, y lo traemos documentado…
Pero, ¿si te imponen a Munguía…”.
-Pues con él negociamos. No les vamos a dejar las manos sueltas”.
Carrillo Ventura es reiterativa en establecer que si no hay diputación, regresará a la regiduría el 15 de junio y si hay resultados, permitirá a su suplente mantenerse en el cargo hasta el último día de septiembre. “Son siete meses…” le dice.
En algún momento se mofan del regidor Cecilio López Fernández. “Es bien burlesco, Me dijo que yo era un tonto y yo también le dije, yo no te ocupo”.
Laurel Carrillo le ofrece un recetario, le anuncia que le herederá la coordinación de la fracción, le indica el nombre de la secretaria y en un determinado momento interrumpe la charla para expresar, “mira, ya llegó mi cheque, llegó”. Fue entonces cuando el regidor, soltó con tono apesadumbrado un “ay, de veras, qué corrompida está ésta madre; Sin embargo”, que sin embargo no queda claro si se refiere a la regidora con licencia.
El “tema económico” les llevó bastante tiempo y en algunos paisajes de la charla hasta se levantan el tono; “tu has visto lo que se gastó, que no fue poquito, este, bueno…. recrimina Laurel a don Rodrigo quien le arrebata la palabra: “Si, ¿pero tú crees que yo no le he invertido a la campaña de Otoniel? La química le revira: “Sí pero yo te hablo de…el regidor la interrumpe con “huff, hijo de la chingada madre… Mira, yo acabo de vender todos mis puercos en 200 mil pesos, 100 mil pesos en un abrir y cerrar los ojos se fueron”.
Revolcadero
La regidora con licencia Laurel Carrillo y el regidor en funciones, Rodrigo García también hablaron de política. Comenta el último: “Ayer hubo una reunión de los internos y es una descalabradora que traen, todos quieren ser presidentes”. Carrillo Ventura pregunta en tono y modo de propuesta “¿porque no sacamos un candidato único, tantas reuniones que tuvimos? La gran mayoría no traen trabajo”. Pregunta el regidor: ¿Y qué va a pasar ahora con estos cabrones? Cuales? Interroga la química. “Los que dejó Bruno Blancas, José Luis Pelayo, ya tiene el control de Morena, entrecomillas, Ramón Mora, que es otro de los antiguos, sí? (“de los puros”, se escucha a Laurel). Que va a pasar con ellos? Morena se va deshacer”, deja la advertencia.****** Los vecinos de Mismaloya bloquearon por varias ayer lunes la circulación por la carretera federal 200 para exigir la intervención de las autoridades se ordene frenar la contaminación del río del mismo nombre de dicha comunidad. Desde hace varios días descubrieron que una o varias empresas han arrojado escombros en el cauce del río. No es la primera vez que bloquean el paso vial en Mismaloya por atentados al medio ambiente. ¿Qué ocurre en Mismaloya? Los amigos nos relatan que desde hace aproximadamente un mes han visto transitar por el callejón rumbo a El Edén camiones de volteo pero le restaron importancia por no ver el material que transportan. Recientemente descubrieron que el material es arrojado en un sitio cuya propiedad se le atribuye a un vecino, mismo que hace una semana, cuando removía parte de su propiedad, recibió la visita de abogados de una empresa. Le extraño le dijeran que esa propiedad, de un frente al río de casi un kilómetro era propiedad del empresario Fernando González Corona. Con esa información sospechan que el empresario puede ser el culpable de la contaminación del río. Saber quién vendió y quien compró la parcela de Sara, la viuda de “el puchas”, es otro misterio. Lo cierto es que, la ley cayó al desarrollo García Blanca y clausuraron trabajos de construcción y remoción de material de montaña que se removía por no tener permiso en regla.